El presidente Alberto Fernández mantuvo una reunión virtual con doce gobernadores de las provincias del norte, quienes se comprometieron a coordinar acciones para minimizar la circulación de personas y evitar en lo posible la expansión de la segunda ola de coronavirus que ya comenzó a propagarse desde el AMBA hacia el interior del país. "La premisa es bajar la cantidad de contagios. Debemos garantizar que la circulación y los contactos sociales sean lo menor posible, hay que hacer ese esfuerzo", pidió el Presidente, quien también conversará con el resto de los mandatarios provinciales antes de disponer la continuidad de las restricciones.
MÁS INFO
De a uno, los gobernadores fueron detallando la situación que viven en sus provincias, con un panorama más incierto que el que atravesaban un par de meses atrás. El Presidente había deslizado entre sus ministros cierto fastidio porque, a pesar de la suba de casos, las provincias fueron reticentes a sumarse a las restricciones dispuestas en el último DNU para el AMBA. Sin embargo, provincias como Córdoba, Santa Fe, Mendoza, Entre Ríos, Tucumán y San Luis también exhiben números preocupantes. "Esta película ya la vimos todos. Se tomaron medidas en el AMBA, pero sabemos que desde el AMBA se irradia hacia los conglomerados urbanos del interior", detalló Fernández en el zoom, donde estuvo acompañado por la ministra de Salud, Carla Vizzotti, y el del Interior, Eduardo "Wado" de Pedro.
El contacto fue con los diez gobernadores del NEA y el NOA más Entre Ríos y San Luis. Fue una de manera del Presidente de volver al mecanismo de consulta que utilizó durante los meses más complicados del año pasado. Vizzotti les trazó un panorama sobre la situación sanitaria y el efecto de las nuevas cepas del virus, más contagiosas y dañinas para las personas menores de 60 años. Justamente, la internación de pacientes más jóvenes -que suelen pasar varios días bajo atención médica- es lo que provoca una mayor ocupación de camas y mayor demanda de oxígeno, otra preocupación que se sumó en los últimos días. La ministra mostró el actual mapa epidemiológico del país y el desarrollo de la campaña de vacunación.
En un día intenso de reuniones, Vizzotti dejó luego el encuentro para sumarse al ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, a la conversación que mantenía en otro salón de la Casa Rosada justamente con los directivos de empresas proveedoras de oxígeno.
Una situación que se complica
"En algún momento nos va a explotar nuevamente", advirtió el gobernador de Jujuy, el radical Gerardo Morales, quien comentó que restricciones light como la de limitar la circulación según el número de documento no le habían dado resultado. Por eso, resolvió adoptar medidas más fuertes como restringir la circulación nocturna, controlar las reuniones sociales y que las clases presenciales sean para la mitad de los grados por vez. Morales fue uno de los gobernadores que dio detalles de los intentos de fraude con que se encuentran cuando quieren salir a conseguir vacunas por las suyas. "Nos piden depositar en un fondo fiduciario. Después investigamos y vemos que es una inmobiliaria. Hay muchos buscas ofreciendo vacunas", contó.
El gobernador de Chaco, Jorge Capitanich, reveló que en los últimos días subieron los contagios en el segmento de la población más joven, de 0 a 19 años. "En los últimos cuatro meses tuvimos mas casos que en los primeros diez meses de la pandemia", subrayó. Con todo, comentó que el plan de vacunación tiene muy buen impacto. Pidió que se fortaleciera la cantidad de camas, respiradores, oxígeno y medicamentos porque el sistema sanitario de la provincia está en tensión.
El entrerriano Gustavo Bordet comentó que su provincia sufría una suba de casos por su proximidad con el AMBA. Aseguró que ya había tomado algunas medidas y que "si tenemos que endurecer, lo haremos". Hubo coincidencias en el agradecimiento al Gobierno por la campaña de vacunación y por el reparto equitativo de las dosis. Uno de ellos fue el gobernador radical de Corrientes, Gustavo Valdés, quien explicó que las ciudades más complicadas eran las del sur de la provincia. "La vacuna es clave, agradezco a la Nación por la exitosa campaña", coincidió el gobernador tucumano Juan Manzur. El riojano Ricardo Quintela también contó que en su provincia habían crecido los casos entre los jóvenes, por lo que estableció que no hubiera más clases presenciales y adoptó restricciones a la circulación nocturna.
Algunos pintaron una situación realmente complicada. "No estamos en un buen momento, el virus se diseminó en toda la provincia", reconoció el gobernador de Santiago del Estero, Gerardo Zamora, quien explicó que el problema se centraba en las reuniones sociales porque la gente se había relajado mucho. "Tenemos que tomar decisiones conjuntas porque si no tomamos decisiones a tiempo se nos mueren los argentinos", reclamó el gobernador de Salta Gustavo Sáenz. Reconoció que resultaba imposible conseguir vacunas por las suyas y agradeció la distribución federal. El gobernador de Formosa, Gildo Insfrán, uno de los blancos predilectos de la oposición, detalló que adhirió al DNU y que las clases se dan en forma remota, gracias a que las escuelas están interconectadas. "Nos llegan ahora muchos casos en UTI de menores de 60 años", agregó.
El jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, había retomado más temprano la mesa Nación, Provincia y Ciudad con su pares porteño Felipe Miguel y bonaerense Carlos Bianco, quienes quedaron en volver a reunirse el jueves, para analizar el efecto producido por las últimas restricciones. Está claro que, a diferencia de lo que sucedía días atrás, hay coincidencia sobre la situación límite que atraviesa el sistema sanitario y que la única solución a mano es frenar, de alguna manera, la circulación.
Cerrar sesión