Antes de su discurso en la Cumbre Iberoamericana que se realiza en República Dominicana, Alberto Fernández se reunió en la mañana del sábado con su par español, Pedro Sánchez. Fue en el hotel Embajador, de Santo Domingo, donde se hospedan todos los mandatarios. Allí, como presidente Pro Témpore del Mercosur, planteó las nuevas dificultades para las exportaciones de los países que conforman el bloque hacia la Unión Europea.
También participó el Alto Representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell, para analizar aspectos relacionados al Acuerdo Mercosur-UE. De la reunión participaron el Canciller, Santiago Cafiero, y el ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación del Reino de España, José Manuel Albares.
Según comunicó el gobierno argentino, "ambas partes se manifestaron a favor de continuar trabajando para encontrar una solución conjunta". Además, durante la reunión las autoridades de ambos países también remarcaron la importancia de la Cumbre UE-CELAC, que se realizará en Bruselas los días 17 y 18 de julio de este año y representa una gran oportunidad de relanzar las relaciones entre América Latina y Europa.
Anoche, una alta fuente diplomática argentina relataba a El Destape el descontento de los gobiernos argentino y brasileño sobre el acuerdo UE-Mercosur: "Queremos seguir con el acuerdo porque fue un trabajo de 20 años. Pero queremos un acuerdo revisado".
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Desde el gobierno argentino sostienen que en el Mercosur ven "fallas en el acuerdo de libre comercio, normativas ambientales que son barreras comerciales y que impacta de lleno en las exportaciones argentinas porque son más restrictivas".
La idea de la reunión de hoy con Sánchez era adelantarle la postura del Mercosur, que está trabajando en cuatro documentos sobre cadenas de valor y ambientales para sumarle al acuerdo. No cambiarlo sino anexarlo, explicaban desde Cancillería argentina. "No queremos cambiarlo porque es retroceder 20 años", indicaron.
La intención es tener listos los documentos en julio de este año y presentarlos en un acto que se realizará ese mes entre Alberto Fernández y el presidente brasileño, Lula da Silva. Será en un evento conjunto entre las ciudad Iguazú, en Misiones y Foz de Iguazú, ya del lado brasileño.
Frío con Lasso y guiño a Boric
El presidente argentino finalmente se encontró con el mandatario ecuatoriano. Alberto Fernández y Guillermo Lasso se volvieron a ver las caras luego de los duros cruces por el altercado diplomático. Fue por el caso de María de los Ángeles Duarte, la funcionaria condenada por corrupción que era asilada en la embajada argentina y que huyó a Venezuela. Por el hecho se expulsó a Gabriel Fuks, embajador nacional en Ecuador.
En la noche del viernes, ambos compartieron una cena. "Se dieron la mano y nada más. Encuentro frío. Ninguno nombró el tema, ni en la cena ni en sus discursos", contó a este portal uno de los testigos del encuentro.
Otro que también se vio con Alberto fue el presidente chileno, Gabriel Boric. En la semana hubo una polémica en torno a una carta de Fernández sobre el tema Ecuador donde en su penúltimo párrafo nombraba a Chile como una nación donde se persiguen opositores.
El ministro de Justicia de Chile, Luis Cordero, respondió públicamente al presidente argentino, Alberto Fernández, por sus críticas a la Justicia chilena. En la misiva que Fernández envió a Lasso, publicada en las redes sociales personales del mandatario el 21 de marzo, acusó que en Chile "se haya puesto al servicio de quienes persiguen opositores", por la decisión de los tribunales de Santiago de aplazar el juicio del caso SQM, que involucra al excandidato presidencial, Marco Enríquez Ominami, miembro del Grupo de Puebla.
En la cena de anoche hubo alguna referencia al tema pero sin escalarlo. "No pasó nada, Boric supo que no pasaba nada". De hecho, contaron testigos del encuentro a El Destape, que el presidente chileno se encontró con Cafiero, que hubo risas, anécdotas y que descomprimieron la situación.