Salares y yacimientos, una oportunidad única que amenaza con desvanecerse

02 de julio, 2023 | 00.05

Argentina se proyecta como un proveedor de peso en el mercado mundial de whidrocarburos y minería ¿Cuáles son los mecanismo de recaudación estatal?

Las reservas, yacimientos y existencias de recursos hidrocarburíferos y mineros proyectan a Argentina como un productor de talla mundial en materia energética prometiendo romper con el histórico déficit crónico de divisas que sufre una economía semi industrial y bimonetaria.

La relevancia que adopta el agro en la provisión de dólares, y por lo tanto en la estabilidad política, social y económica interna quedó en completa evidencia con el desfalco de 20.000 mil millones de dólares que produjo la sequía y su directo correlato en la evolución inflacionaria, salarial y productiva.

Este contenido se hizo gracias al apoyo de la comunidad de El Destape. Sumate. Sigamos haciendo historia.

SUSCRIBITE A EL DESTAPE

La invasión rusa a Ucrania también evidenció la debilidad de la matriz energética argentina, los mayores precios del combustible impactaron directamente en las tenencias de divisas del estado, las mismas, se vieron diezmadas por el incrementos de los costes de importación.

Ahora bien, la puesta en marcha de una masiva extracción de insumos energéticos promete transformarse en un hito trascendental para el país, que al romper con la provisión monopólica del campo en el abastecimiento de moneda norteamericana, cortará la cíclica asfixia al desarrollo y al crecimiento económico autónomo que la disponibilidad de dólares genera.

De acuerdo a los datos publicados por el ministerio de Economía de la Nación, la producción de petróleo en el primer cuatrimestre del año alcanzó su nivel más alto desde 2009, mientras que la producción de gas registró el mayor volumen desde 2019 marcando aumentos interanuales de 10,4%, para el primer insumo productivo, y de 1,3% en el segundo. Tendencias que continuarán al alza en la medida que los desarrollos en infraestructura lo acompañen.

El estado nacional, a través de YPF, lidera las producciones de ambos insumos clave. En petróleo, la empresa privado-estatal produjo un 11,9% más que el año pasado con una participación del 48,9%. En lo que respecta al gas, si bien la extracción cayó un 6,1% con respecto a abril de 2022, la participación en el total producido es del 26,8%.

En lo que respecta al frente externo, en el mes de abril el complejo hidrocarburífero aportó 514,7 millones de dólares configurando el segundo envío al extranjero más importantes para un cuarto mes del año desde 2014.

La capacidad productiva de YPF dota al aparato estatal de un gran activo presupuestario que aspira a multiplicarse en los próximos años y que permitirá desplegar innumerables acciones para asegurar el desarrollo sostenido, sustentable e inclusivo del país.

Ahora bien, el abastecimiento de dólares frescos no se limita sólo a la participación estatal en las extracciones sino que la captación de renta petrolera y gasífera para agrandar los presupuesto nacionales y provinciales se compone también de retenciones, tributo con destino a la caja nacional, y regalías de recaudación provincial.

En lo atinente a lo presupuestos provinciales la ley de Hidrocarburos establece que las regalías que reciben las jurisdicciones dueñas de los recursos se componen de un 15% de los valores del petróleo y el gas, así como los de las ventas de combustibles y Gas Licuado de Petróleo (GLP).

En lo que corresponde al petróleo y la hacienda nacional, el precio internacional del barril Brent es la referencia para el mercado argentino donde,  según su cotización, se fija la siguiente escala de variaciones para las retenciones: si la cotización del barril es igual o está por debajo de 45 dólares, la alícuota es del 0%, si es igual o superior a 60 dólares, será del 8%.

Aún así a fines del año pasado, el Poder Ejecutivo habilitó el procedimiento para que las compañías extractivas accedan a los beneficios del Régimen de Promoción de Inversión para la Explotación de Hidrocarburos de 2013, el mismo establece un incentivo a la inversión que permite a las petroleras pueden exportar el 20% de su producción sin pagar retenciones. Para acceder al beneficio, las compañías deben haber realizado una inversión mínima de u$s 250 millones en un plazo de tres años.

Pese a los buenos pronósticos, el camino que separa a la potencialidad de la realidad se cubre de los obstáculos que genera el péndulo político argentino, es decir, de los modelos productivos adoptados por cada fuerza política como expresión de opuestos grupos de interés.

Sectores de la oposición pregonan la inmediata necesidad de la salida del cepo cambiario y la libre compra de divisas, algo que prometen inaugurar en caso de ser gobierno y ante lo cual cabe preguntarse: ¿De dónde provendrán las divisas que libremente se podrán adquirir? ¿De las nuevas extracciones hidrocarburíferas y mineras? Todo parece indicar que ese es el caso.

Entonces, la política “liberalizadora”, tal como sucedió en la última gestión de Cambiemos, se transformará en encadenadora. El sueño de revivir un modelo desbocado de ventajas comparativas pone en peligro el “despegue” nacional. Allí, en los subsuelos del sur y del norte Argentino descansa el anhelado fin del cepo opositor y el alimento de un nuevo proceso de fuga de capitales.

El péndulo político amenaza. Si se fuga Vaca Muerta, se escapará una oportunidad sin parangón para el desarrollo argentino. En este marcó, el llamado al consenso en torno al usos de divisas se vuelve fundamental.