Por el modelo económico que implementó el Gobierno en los últimos cuatro años, se duplicaron la cantidad de personas que experimentaron hambre. La brutal estadística devino del aumento de la pobreza, ante la escalada inflacionaria que caracterizó la gestión del presidente, Mauricio Macri.
Los datos provienen de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO). Entre 2013 y 2015, las personas que sufrieron inseguridad alimentaria grave fueron 2.500.000, según el promedio trienial. El número saltó a 5.000.000 de personas entre 2016 y 2018.
A la estadística le falta lo ocurrido en 2019. Con la pobreza trepando 8,1 puntos hasta 35,4% en el primer semestre, y la indigencia creciendo 2,8 puntos hasta 7,7%, las cifras deberían haber empeorado.
La FAO definió a la inseguridad alimentaria grave: "Cuando el miembro o miembros del hogar se hayan quedado sin alimentos, hayan experimentado hambre y, en las situaciones más extremas, hayan pasado varios días sin comer"
Otra medición del organismo internacional fue la de inseguridad alimentaria grave o moderada, que a ese número le suma las personas con dificultades para acceder a una alimentación de calidad: "Se habla de inseguridad alimentaria moderada cuando los miembros de una familia se ven obligados a modificar la cantidad o calidad de los alimentos como consecuencia de las incertidumbres asociadas a su capacidad de acceder a alimentos".
En este apartado, el informe mostró que entre 2016 y 2018 se sumaron 5.900.000 personas a la lista de gente que tuvo inseguridad alimentaria grave o moderada. Eran 8.300.000 en 2014-2016 y pasaron a ser 14.200.000 en 2016-2018.