El papa Francisco partió el lunes por la mañana rumbo a Chile y llamó la atención a los presentes en su vuelo al referirse a la tensión nuclear que existen entre Estados Unidos y Corea del Norte: "Tengo miedo de una guerra nuclear, estamos al límite".
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"Sólo hace falta un percance para que se inicie la guerra. La situación puede precipitarse a partir de un error. Entonces, es necesario destruir las armas. Esforcémonos por llevar a cabo el desarme nuclear", aseguró durante su viaje al país vecino.
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Este análisis del Sumo Pontífice ocurrió luego de que uno de los presentes en el avión le mostraran una foto de la devastación de la bomba atómica de Nagasaki en 1945.
El avión del pontífice despegó a las 08H00 GMT (5 AM de Argentina) del aeropuerto de Fiumicino de Roma rumbo a Santiago, para recorrer 12.500 km en 15h40 de vuelo, dando inicio a su sexto viaje a América Latina.
Durante su estancia de tres días en Chile, se reunirá con autoridades, comunidades indígenas, religiosos y pobres, en Santiago, Temuco (600 km al sur de Santiago) e Iquique (1.800 km al norte), donde realizará multitudinarias misas.
El papa argentino, de 81 años, regresa a un Chile muy diferente del que conoció en sus años de seminarista, en la década de los sesenta.
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