Otra fábrica está en quiebra y sus trabajadores buscan convertirla en cooperativa

Los trabajadores de Agroindustria Madero, perteneciente a Carlos De Pina, se encuentran en huelga y analizan tomar la fábrica y convertirla en cooperativa luego de cuatro meses con la producción parada y sin cobrar sueldos. Sospechan que pese a la falta de dinero, la empresa sigue facturando.

Diego Oscar Blanco, empleado de Biomadero, en diálogo con El Destape, criticó al dueño por el supuesto vaciamiento de la fábrica, que produce (o producía) biodiesel: "Se le debe plata al municipio y a la AFIP. Se le deben cuatro millones y medio de pesos a la ART y hace dos años que no le aporta al ANSES, la vació toda y está esperando que nos vayamos solos".

Los empleados trabajaron un año sin contar con ART y hace dos que De Pina no aportó para sus jubilaciones, pese a que les hacía los descuentos. En diciembre de 2015 dejaron de contar con obra social, cobrando salarios en cuotas y desde abril de 2016 ninguno percibió salario: desde entonces, la fábrica paró totalmente la producción.

Cesar "Chino" Ruiz, delegado de Biomadero, miembro de la Comisión Interna de Agro y Bio y de la Comisión Directiva del sindicato de Aceiteros, respondió que no pueden determinar si es que De Pina sigue facturando: "Vino un camionero a llevarse unos remitos como si ellos vendían un aceite en Quilmes pero no se hizo acá, se lo compraron a Cañuelas. Suponemos que en lo legal sigue trabajando pero en vez de producirlo lo tercerizan".

De Pina cuenta con tres empresas: Molinos Navarro, Agroindustria Madero y BioMadero. El predio, ubicado en la Matanza es de Molinos Navarro. Ésta le alquila la locación a la segunda y a su vez, Agroindustria Madero le alquila una parte del lugar a la tercera. De esta manera, el dinero pasa de una entidad a la otra, siempre al mismo dueño.

El último miércoles hubo una reunión entre Aceiteros, delegados de la empresa y el Ministerio de Trabajo para solucionar el conflicto. Allí, De Pina presentó la quiebra, por lo que los trabajadores tomaron la fábrica y tendrán una reunión el próximo lunes para determinar si se constituyen como cooperativa: "No queremos abandonar el lugar, somos 156 familias y hay gente que tiene 15 años de antigüedad".