La causa contra los jefes policiales de la Masacre de la Carcova, ocurrida en 2011 en la localidad bonaerense de San Martín y de la que hoy se cumplen ocho años, fue archivada. En esa trágica jornada, Mauricio Ramos (17) y Franco Almirón (16) fueron fusilados por la Policía Bonaerense, mientras que Joaquín Romero fue herido de gravedad, pero logró sobrevivir. Familiares y organizaciones sociales y políticas realizarán una jornada solidaria en el barrio, en el marco del Día por la eliminación de la Violencia Institucional.
La Masacre de Carcova ocurrió luego de que un tren de carga se descarrilara. Los vecinos de José León Suárez, que viven de oficios basados en la economía popular como la recuperación de residuos, se estaban preparando con sus carros. Al acercarse, fueron ferozmente reprimidos por parte de efectivos policiales que arremetieron para proteger al tren disparando balas de goma y plomo a mansalva.
Mauricio y Franco estaban con sus amigos esperando para ingresar a la quema. Romero fue gravemente herido y haber sobrevivido le permitió atestiguar en el juicio oral de 2014, en el que quedó demostrado que la única banda armada en la zona era la Policía Bonaerense.
Este contenido se hizo gracias al apoyo de la comunidad de El Destape. Sumate. Sigamos haciendo historia.
En 2014 la Justicia condenó a Gustavo Vega por tentativa de homicidio simple contra Joaquín y absolvió a Gustavo Rey por los homicidios de Franco y Mauricio. En noviembre de 2015, la Sala I del Tribunal de Casación Penal de la provincia anuló la absolución de Rey y ordenó realizar un nuevo juicio para determinar su responsabilidad. Recalificó la condena a Vega -de tentativa de homicidio simple calificado, por abuso de la función policial y por el empleo de arma de fuego- y ordenó al tribunal del juicio ajustar la pena.
“Carcova es otro caso más en una serie de casos de violencia institucional donde se resisten a avanzar contra los jefes policiales”, dice Federico Efron, abogado del Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) y representante de los familiares de las víctimas. Y detalló: “A fin de 2018 la Unidad Fiscal (UFI) 5 en un párrafo y medio, literalmente, respondió a nuestro cuarto pedido de que se cite a los jefes como imputados diciendo que no hay ningún delito”.
Efron sostiene que no hay forma de apelar porque las pruebas ya están expuestas y solicitan el apartamiento de la fiscal general de San Martín, Gabriela Disnan, “porque no ha trabajado dentro de lo que corresponde”. El abogado afirma que en el juicio oral quedó acreditada la responsabilidad del comisario Hualde y el subcomisario Pino frente al operativo policial desatado aquel 3 de febrero. Sin embargo, el Poder Judicial y el Ministerio Público Fiscal de la provincia de Buenos Aires dicen que no hay responsabilidad penal.
“En un caso de violencia institucional donde hay un operativo policial y una cadena jerárquica en la cual algunos dan órdenes y otros responden, hay una resistencia común del poder judicial a investigar y avanzar contra los jefes policiales”, concluye Federico Efrón.
Cárcova es el nombre que recibió el barrio en homenaje al pintor Ernesto de la Cárcova, pero los vecinos lo legitimaron rebautizándolo sin acento. Carcova fue también el puntapié que disparó la conformación de la Campaña Nacional contra la Violencia Institucional para decir basta de represión policial. Para decir: Ni un pibe menos, Ni una piba muerta más por efectivos policiales.