Tras su salida de América, el conductor de La Cornisa, Luis Majul, adelantó que se presentará en la Justicia para probar que su “renuncia” al canal fue por “motivos político” y apuntó principalmente al mayor accionista que tiene la señal, Daniel Vila.
En una entrevista con Clarín, el periodista macrista aseguró: “Mi desvinculación de América tuvo motivos políticos. Y en esta historia hay un momento clave: la política editorial de América y A24 empezó a cambiar, a dislocarse, a intoxicarse, cuando Daniel Vila estuvo en la presentación del libro Sinceramente, de Cristina Fernández de Kirchner, en la Feria del Libro”.
“No hay nadie en el canal -ningún accionista, ningún programador, ningún periodista- que sea capaz de desmentir, con argumentos y dos dedos de frente, lo que yo estoy diciendo. El clima se empezó a enrarecer… Y no estoy diciendo que el presidente Alberto Fernández haya tenido que ver con esto. He hablado largamente con él y me consta que no tuvo nada que ver con esto”, advirtió.
Asimismo, Majul contó que “un responsable de asuntos públicos se incorporó al staff directivo de América. Y empezó a trabajar para conseguir dinero oficial de las intendencias, cercano a los poderes ejecutivos provinciales y municipales que responden al cristinismo” y sostuvo que “a partir de ahí, todo el ambiente de América y A 24 se empezó a enrarecer cada vez más”.
Para el operador periodístico su salida no tuvo que ver con que quisieron cambiar de día a su programa, sino que fue por sus exacerbadas críticas a la vicepresidenta y a su espacio político: “Esto tuvo que ver con una decisión política de uno de los accionistas del canal, por las presiones de Cristina y de algunos dirigentes de La Cámpora”
“Sí, en un momento me pidieron que La Cornisa saliera los sábados en lugar de los domingos, y yo dije que lo iba a pensar. Pero antes de irme de vacaciones, a mitad de enero, les dejé muy claro que no iba a hacer el programa los sábados porque consideraba que, de esa manera, perdía relevancia periodística y política. Después de eso tuve otra charla con Daniel Vila, y él me propuso que La Cornisa fuera los domingos a las 22”, explicó el periodista.
No obstante, indicó que en su otro programa que iba durante la semana “hubo presiones políticas por críticas a Cristina, a Daniel Scioli” y afirmó: “Me llamó Liliana Parodi, programadora del canal, para decirme que había sido reprendida por las críticas que habíamos hecho, y que el directorio me ordenaba que La Cornisa debía ir los sábados. Ahí, me sentí violentado”.
“Y decidí irme. Todo esto lo voy a probar ante la Justicia cuando presente la demanda correspondiente”, sentenció.