Cientos de miles de personas se reunieron este martes en Plaza de Mayo para darle la bienvenida a Alberto Fernández a la presidencia de la Nación. El flamante jefe de Estado y su vice, Cristina Kirchner, se dirigieron a los ciudadanos pasadas las 20 y los discursos terminaron con una lista musical cargada de mensajes para lo que se viene en el país y una pequeña chicana a Mauricio Macri.
Alberto y Cristina ingresaron al escenario montado al frente de Casa Rosada con Deja Vu, de Gustavo Cerati, cuyo estribillo reza: "Tanto pediste retener ese momento de placer, antes de que sea tarde. Vuelve la misma sensación, esta canción ya se escribió hasta el mínimo detalle". La interpretación puede ser variada, como toda interpretación, pero el "momento de placer" perdido y recobrado "antes de que sea tarde" y una historia que "ya se escribió hasta el mínimo detalle" hacen referencia a lo manifestado por el Presidente en múltiples ocasiones: volver a sacar a la Argentina de la crisis en la que se encuentra, producto de políticas neoliberales.
Después de los discursos, sonó "Jijiji", de Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota. Una banda que acompañó mucho la campaña ya que Marcelo Figueras, uno de los periodistas más cercanos al Indio Solari, fue quien entrevistó a CFK en cada presentación del libro "Sinceramente". El estribillo "no lo soñé, se enderezó y brindó a tu suerte" buscó graficar el deseo de "volver" pese a todos los pronósticos. Una vuelta del peronismo impensada para muchos hasta hace tan sólo siete meses.
La lista de temas siguió con "Hablando de la libertad", una canción con la que La Renga cierra todos sus recitales. "Ahora solo un camino he de caminar, cualquier camino que tenga corazón. Atravesando todo su largo sin aliento, dejando atrás mil razones en el tiempo. Y morir queriendo ser libre, encontrar mi lado salvaje, ponerle alas a mi destino, romper los dientes de este engranaje", en un marco de entrega a las manos de los intereses económicos concentrados en detrimento del bienestar de las mayorías.
Tras de estas dos bandas, que sonaron como posible sorpresa para el cierre del festival en Plaza de Mayo, llegó una pequeña chicana al expresidente Mauricio Macri con "El mono relojero", de Kapanga, y su clásico "andate a dormir vos, yo quiero estar de la cabeza". La canción tomó relevancia nuevamente cuando el exjefe de Estado mandó a dormir a sus militantes el 11 de agosto, después de perder la PASO por casi 17 puntos.
Después del rock llegaron la cumbia y el cuarteto. Primero sonó "No te creas tan importante", en la voz de Damas Gratis y después "840", de Rodrigo, y la multitud bailó después del show de fuegos artificiales y papelitos celestes y blancos.
El rock volvió de la mando del Indio Solari y los Fundamentalistas del Aire Acondicionado con "El tesoro de los inocentes" y su clásico "si no hay amor que no haya nada, entonces", con el objetivo de volver a fortalecer los lazos sociales, basados en el entendimiento y la empatía.
La Renga sonó nuevamente con su hit "Veneno" y la advertencia: "Casi sin darte cuenta se te puede enfermar el corazón, cuando uno menos lo espera, el veneno ya está en tus venas".
Los discursos terminaron a las 21 pero la multitud permaneció unos cuantos minutos más, después de haber estado todo el día bajo temperaturas agobiantes y al ritmo de más de una decena de artistas que acompañaron la histórica jornada con música en vivo.