Gonzalo Higuain está en el foco de la polémica en Italia debido a que anoche salió del país ya que su madre estaría enferma, pese a que las autoridades decretaron la cuarentena obligatoria. El destino del delantero sería Argentina, para lo cual presentó un certificado médico que asegura que no está contagiado con el COVID-19.
La elección de Pipita viola la cuarentena que el club había impuesto a todos sus empleados, incluidos los jugadores, después de la positividad del defensor Daniele Rugani, y del francés Blaise Matuidi. Higuaín, como muchos jugadores, pero también el presidente Andrea Agnelli, había estado en aislamiento voluntario en casa durante una semana.
El futbolista se presentó en el aeropuerto de Turín Caselle con una certificación médica que declaraba que estaba infectado con coronavirus y con un avión privado esperándolo en la pista, según informó Corriere dello Sport.
El campeón con la Juventus quiere llegar a Argentina, pero los vuelos desde Italia están bloqueados, por lo que organizó un traslado con su familia para llegar primero a Francia, luego a España y desde allí volar a Sudamérica. La realidad es que los vuelos desde Europa están bloqueados por el gobierno argentino y su llegada es toda una incógnita. Solo podría arribar en un vuelo especial de Aerolíneas Argentinas.
Los agentes también se pusieron en contacto con la compañía para averiguar si las certificaciones presentadas eran ciertas, pero no está claro si la Juve fue informado de las intenciones desde arriba.
Higuaín, quien en los últimos días ha sido testigo en las redes sociales de la campaña de donación de la Juventus para apoyar la lucha contra el nuevo coronavirus, no es el primer campeón en abandonar Turín. Cristiano Ronaldo también está en Madeira, con su familia, después de haberse mudado a Portugal, incluso antes de detener el campeonato para estar cerca de su madre hospitalizada después de un derrame cerebral.