Tras dos meses sin sesiones y ante el conflicto social en Bolivia y Chile, Fernando Iglesias expuso en la Cámara de Diputados su posicionamiento lo que generó abucheos y gritos en su contra dentro del recinto.
El diputado nacional del PRO por la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, en primer lugar apuntó contra el diputado nacional Felipe Solá y de paso criticó al ex presidente del Banco Central y referente económico del Frente Renovador, Aldo Pignanelli que falleció el 15 de junio pasado, lo que generó el repudio generalizado en el lugar.
"Me causa gracia escuchar al canciller in péctore (por Solá) hablando de la condena de la violación de la voluntad popular cuando yo me acuerdo que en esta misma sala tuvimos a una turba encabezada por el "Gordo Bazuca" que le tiró quince toneladas de piedras (sic) a la policía y pueden googlear sus declaraciones al lado del señor Pignanelli, riéndose, diciendo que había sido "un hermoso día peronista", afirmó cuando otros diputados comenzaron a insultarlo.
Luego, apuntó contra el presidente boliviano, Evo Morales, que se vio obligado a viajar a México para obtener asilo político frente a la violencia en ascenso que sufren los dirigentes oficialistas en su país.
En ese sentido, intentó dar a entender que fue su responsabilidad el golpe de Estado, basado en el posicionamiento de la OEA respecto a las elecciones.
"El pecado de Evo no fue lo que hizo desde sus políticas públicas, el pecado de Evo es que hizo fraude y no es un error, porque la peor dictadura de la región y la mayor violencia ocurre en Venezuela, muchachos", acotó.
En ese momento, se levantaron varios diputados para cruzarlo y abuchearlo, por lo que Pablo Tonelli que moderaba, tuvo que pedir calma y silencio. "Yo rendondeo pero ellos hacen silencio", pidió Iglesias.