El FMI le realizará un gesto a Cambiemos que le puede ayudar a mejorar su resultado en las elecciones presidenciales. El Fondo prevé recortar el pronóstico económico para el último año de Mauricio Macri en la presidencia, lo que lo dejará bien parado en el país y ante los mercados internacionales.
El organismo multilateral de crédito había pronosticado en octubre pasado una recesión del 1,6% para 2019. Sin embargo, el ente presidido por Christine Lagarde mejorará la estimación a una caída de sólo el 1,3%, según confiaron fuentes internas a El Destape.El cambio se plasmará en abril, cuando el FMI oficialice sus proyecciones económicas mundiales.
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El Fondo revisa sus indicadores dos veces en el año. La primera se realiza en abril y la segunda en octubre, fecha para la que habrán concluido las PASO en Argentina y ya estará definida la tendencia de las votaciones definitivas, de acuerdo al cronograma electoral local.
En 2018, Lagarde le concedió el mismo favor a Macri de subestimar la grave crisis económica que generó el PRO. En abril de ese año, el ente internacional había proyectado que la actividad iba a tener en 2019 el sustancioso crecimiento, del 3,2%. Sin embargo, un semestre después, en octubre, lo tuvo que rebajar al 1,62%. Esa es la cifra que ahora el Fondo disminuirá hasta el 1,3%.
Desde esta semana comenzaron una serie de entrevistas con diversos sectores el jefe de la misión del FMI, Roberto Cardarelli, y Trevor Alleyne, el economista jamaiquino que tutea las políticas de Macri. Los emisarios del mayor prestamista del país pidieron encontrarse con el presidente de la Sociedad Rural, Daniel Pelegrina, el gobernador de Salta, Juan Manuel Urtubey, y los diputados Sergio Massa y Axel Kicillof.
Todos los participantes tendrán un rol importante en el próximo gobierno (porque lo formarán o serán oposición), y al organismo le preocupa el potencial default que el PRO obligue a tomar ante la gigantezca deuda que tomó. En esa línea, Kicillof le expresó a Cardarelli y Alleyne que sin un programa sustentable, la economía argentina no volverá a crecer y, por lo tanto, no generará los dólares necesarios para devolver los créditos.