Pese al decreto que prohíbe despidos durante 60 días, la empresa Dánica echó la semana pasada a cinco trabajadores y cerró "hasta nuevo aviso" la planta que tiene en Lavallol. En declaraciones a El Destape los empleados denuncian que les adeudan el pago de un bono de 52 mil pesos, paritarias y también aportes previsionales. Cómo fue el recorte que sufrió la firma en el macrismo.
"El lunes llegamos a la planta y nos encontramos con un candado en la puerta y un papel pegado que decía que cerraban hasta nuevo aviso. Esto no tiene sentido, porque esta es una empresa de producción esencial", afirmó a El Destape el trabajador de Dánica y secretario de acta de Sindicato de Aceiteros de Capital, Carlos Brito.
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Los empleados explican que el conflicto comenzó en mayo de 2019 cuando la firma los obligó a una reducción salarial debido a la crisis económica que atravesaba el sector por la caída del consumo. Eso llevó a un reclamo de los trabajadores que hicieron un paro y que tuvo como represalia el despido de 33 empleados, de los cuales luego fueron reincorporados 18.
En diciembre pasado, los obreros denunciaron que la empresa propuso reducir el pago de aportes previsionales y obra social a cambio de abonar las horas extra y los gastos que adeudan.
"Nos nos pagaron la paritaria que consiguió aceiteros y además nos deben un bono de 52.000 pesos", afirma Brito.
En los telegramas de despido, la empresa alega que cada echado "incumplió con las indicaciones de prestación de servicios, absteniéndose de realizar labores en jornadas sumplementarias los días 27/03 de 21 a 01 y 30/03 de 21 a 00.00 horas".
Lo que ocurrió es que 26 personas de la fábrica debieron refugiarse en sus hogares porque son población de riesgo y estaban expuestos en la fábrica. Con el faltante de personal y la creciente demanda, la empresa exigió a los trabajadores que hicieran horas extra que iban a ser abonadas. Sin embargo, algunos se negaron alegando que aún les debían el pago del bono y otros porque no podían realizarlas.
Tras los despidos y el pedido de Conciliación Obligatoria, la empresa decidió cerrar la planta, sin dar una explicación a los obreros y en medio de la cuarentena obligatoria.
La empresa tiene más de 150 empleos directos. De ellos 109 están afiliados a aceiteros, 30 son superiores y 15 administrativos. Además emplean a una firma tercerizada de maestranza.
En su mejor momento, la empresa contó con más de 360 trabajadores, detallan desde el Sindicato de Aceiteros.