Los números, fríos e implacables, dicen que Daniel Scioli se impuso en la primera vuelta de las elecciones presidenciales por 2,5 puntos por sobre Mauricio Macri. Fueron 36,8% a 34,3%. El panorama queda abierto para el balotaje, que se llevará a cabo el 22 de noviembre, pero con dos estados de ánimo bien distintos: el FpV, golpeado por la exigua diferencia y la derrota en la provincia de Buenos Aires; Cambiemos, envalentonado y confiado en dar el asalto final a la Casa Rosada.
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La performance del actual jefe de Gobierno porteño superó inclusive las estimaciones propias. Es que el candidato del frente que componen el PRO, la UCR y la CC estuvo 1,6 millón de sufragios por arriba de la interna del pasado 9 de agosto. El FpV, por su parte, apenas subió 282 mil votos desde las PASO. ¿Cómo se explica?
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En primer lugar hay que apuntar al incremento de la participación electoral en este comicio. Mientras que en las elecciones primarias, afectadas por las inundaciones en la provincia de Buenos Aires, participaron 24,4 millones de electores, este domingo el número ascendió a 25,2 millones de personas. A esto hay que sumarse que el voto en blanco bajó a la mitad: de 1,2 millón a 600 mil. A la luz de los resultados, gran parte del incremento de los votos positivos fueron para Cambiemos.
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Esto pudo verse en la provincia que a partir del 10 de diciembre gobernará María Eugenia Vidal. Scioli obtuvo prácticamente la misma cantidad de votos (3,4 millones) que en agosto, pero aumentó la participación electoral casi en la misma proporción que el ascenso de Cambiemos: el frente obtuvo 2,5 millones en las PASO y ahora, 3 millones. De una elección a otra, votaron 600 mil bonaerenses más.
Córdoba fue uno de los grandes objetivos de las campañas de los principales candidatos. En la provincia donde se impuso José Manuel de la Sota salieron a disputar el voto peronista (Scioli) y anti k (Macri) y claramente el voto delasotista acompañó a Cambiemos. En la provincia mediterránea, el frente opositor subió del 35% (678 mil votos) a un categórico 53% (1,1 millón). ¿Cuánto sacó De la Sota en las PASO? 635 mil, prácticamente lo mismo que subió Macri.
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Si el voto de José Manuel De la Sota fue, en gran parte, a Macri, entonces ¿por qué Massa no solo no cayó sino que terminó por encima del 20% de UNA? Ahí puede explicarse la baja performance de Scioli. En las provincias del Norte el FpV decayó en porcentaje a expensas de un crecimiento del candidato del Frente Renovador.
UNA ascendió de los 4,6 millones de votos a los 5,2 millones, con la explicada sangría delasotista. Sin embargo, Massa recuperó terreno, por ejemplo, en Jujuy, en donde salió primero y desplazó al segundo puesto a la fórmula Scioli-Zannini. Fueron 101 mil votos para UNA contra los 154 mil de ayer. El FpV bajó de los 157 a 139 mil.
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En Tucumán, que estuvo en boca de todos por los comicios provinciales que consagraron a Juan Manzur como gobernador, Scioli sacó 500 mil votos en las PASO (57,4%) pero bajó a 448 mil (48,5%). Massa y De la Sota obtuvieron unidos 141 mil votos (16,2%) y el líder del FR llegó a 189 mil (20,5%). Cambiemos también creció: de 175 mil (20%) a 247 mil (26,8%).
Salta es un ejemplo similar. Si bien mantuvo el primer lugar, el caudal de votos de Scioli se mantuvo casi estable: de 273 a 281 mil votos. El salto más grande lo dio UNA, que pasó de 171 a 236 mil votos. Massa, en el NOA, terminó funcionando como un "corralito" para las aspiraciones del FpV. Uno llega golpeado, el otro sacando pecho, pero tanto el Frente para la Victoria como Cambiemos llegan vivos al 22 de noviembre.