El servicio de telefonía 4G tardará cinco años en alcanzar el despliegue total

18 de diciembre, 2014 | 18.44
Por Nicolás Furfaro
Redacción El Destape

Este contenido se hizo gracias al apoyo de la comunidad de El Destape. Sumate. Sigamos haciendo historia.

SUSCRIBITE A EL DESTAPE

@efenicolas

Fuentes del mercado de las telecomunicaciones aseguran que el 4G tardará cinco años en alcanzar su despliegue total y tres en contar con una masa crítica de usuarios conectados a la red. El lanzamiento que Movistar concretará el lunes - y luego acompañarán las otras compañías - sólo implica la habilitación de las primeras antenas para ofrecer el servicios en tramos limitados de la Ciudad de Buenos Aires, con foco en aquellos que muestran más problemas de funcionamiento de las líneas o tienen clientes con mayor poder adquisitivo.

A pesar de los grandes anuncios en lo inmediato, en el mercado también subrayan que la base instalada de equipos que tienen la posibilidad de usar el 4G es sólo del 2% del total. Por esa razón las compañías de celulares preparan campañas para que los clientes comiencen a adquirir smartphones de alta gama.

El microcentro porteño será el primer lugar en el que los teléfonos podrán utilizar el servicio ya que es el que cuenta con mayor congestión de las líneas. Luego seguirá el corredor norte y zonas de alto poder adquisitivo, pasos a los que deberá seguir la expansión en las capitales de las provincias más habitadas, ciudades importantes como Mar del Plata y Rosario, y algunas rutas. La expectativa es completar este proceso en 18 meses.

"Hay que tener presente que la llegada del servicio no se puede dar de un día para el otro. Una red nueva requiere equipamiento específico y un trabajo para concretar la extensión, cuestión que ya se vio con el 3G, que dio sus primeros pasos en 2007 y tardó en desarrollarse", explicó Enrique Carrier, consultor especializado en telecomunicaciones. Además, sostuvo que cuando se complete el largo camino que queda por delante, se verán beneficios para los clientes pero también para las compañías de celulares.

Por un lado las líneas con 3G obtendrán un mejor servicio y las de 4G contarán con una velocidad mucho mayor a la actual; por el otro, los antecedentes en el resto del mundo muestran que al ser más simple la utilización de internet en el teléfono, los usuarios aumentan el consumo de datos y eso deriva en una mayor facturación por parte de las empresas, que ya muestran grandes ganancias.

Además, fuentes privadas le indicaron a El Destape que el apuro por instalar la idea de la nueva tecnología responde al atraso en las inversiones. La necesidad de buscar caminos para volcar menos dinero en infraestructura, pero de todas formas mostrar mejoras en el servicio, encontró en la nueva tecnología un camino conveniente.

Con las antenas que se van a utilizar se le puede dar servicio 4G a 20 líneas de teléfono por cada línea 3G, cuestión por la que es más barato invertir en el nuevo sentido que lo que hubiera costado estar al día con la anterior tecnología.