El FPV en la Ciudad: por ahora, se impone la idea de unas PASO para jefe de Gobierno y lista única en legisladores

El kirchnerismo enfrenta la transición en el distrito que más le ha costado en estos 12 años: la ciudad de Buenos Aires, un terreno difícil para el oficialismo nacional. Incluso, en las pasadas elecciones legislativas de 2013, perdió el lugar como principal fuerza opositora, desplazado por UNEN, que en ese momento tenía un discurso más crítico al PRO que el que tiene ahora, en su versión jibarizada por las internas y las tentaciones externas a hacer alianzas.

En ese armado de cara a las elecciones internas del 26 de abril y las generales del 5 de julio, la opción que prevalece entre el FPV y aliados es la de armar una gran PASO para definir la candidatura a jefe de Gobierno, pero presentar una lista única en legisladores, donde confluyan todos los espacios: La Cámpora, el sciolismo, Nuevo Encuentro, el ibarrismo y FORJA.

Quienes hoy están lanzados dentro de este sector político son el titular del grupo Bapro, Gustavo Marangoni, bajo el lema "Marangoni es Scioli en la Ciudad"; la ex titular del INADI María José Lubertino, recientemente convertida al sciolismo; Gabriela Cerruti y Carlos Heller por Nuevo Encuentro; el forjista Gustavo López (con apoyo del partido MILES, de Luis D'Elía); el propio Aníbal Ibarra y se presume que La Cámpora presentará un candidato, que podría ser Mariano Recalde, Juan Cabandié o algún tapado que surja.

Ante este panorama, se plantea la duda si finalmente todos irán a las PASO o, ante la gran cantidad de candidatos, alguno declina la postulación. Según pudo averiguar El Destape, ni desde el lado de Cerruti ni del lado de Ibarra piensan bajarse en esta carrera, salga como salga. "La candidatura (de Ibarra) no se baja", remarcaron desde ese espacio. Fuentes cercanas a Gabriela Cerruti resaltaron que ella "quiere ser jefa de Gobierno" y si no se puede en esta elección, lo intentará en 2019.

Para la lista de legisladores suenan Juan Manuel Olmos, vinculado al secretario general del gremio de los encargados de edificios, Víctor Santamaría; Paula Penacca y Javier Andrade, de La Cámpora; y Silvia La Ruffa por el sciolismo. La Ruffa ya fue legisladora porteña y actualmente es funcionaria del Ministerio de Justicia bonaerense, a cargo de Ricardo Casal.

El debate respecto a lista de legisladores y comuneros está entre quienes suponen que es mejor poner las energías en el debate entre posibles jefes de Gobierno y consensuar una lista para evitar mayores rispideces, como proponen desde el sciolismo, y entre quienes sostienen que lo mejor es ir a una PASO completa, recordando la experiencia de UNEN en 2013. En esta última línea se encuentra Gustavo López, Heller e Ibarra.

Con este panorama, que promete algún cambio a último momento, todo se negociará al filo del cierre de presentación de alianzas, el próximo 25 de febrero, y de candidaturas, el 7 de marzo.

Las elecciones porteñas han sido un duro escollo para el kirchnerismo. Paradójicamente, la primera fue la única vencida, cuando Ibarra, en busca de su reelección y con el apoyo del naciente gobierno de Néstor Kirchner, se impuso en ballotage sobre Mauricio Macri en 2003. Obtuvo 53,48% con Ibarra-Telerman, mientras que Macri y Rodríguez Larreta alcanzaron el 46,52%.

Sin embargo, en 2007 y 2011 le alcanzó para llegar a la segunda vuelta, por encima de terceras fuerzas, pero cayó en ballotage. Primero, obtuvo el 23,77% en primera vuelta y 39,06% en el ballotage en el que Filmus y Heller quedaron detrás de Macri y Michetti. Cuatro años más tarde, obtuvo 27,78% en primera vuelta y 35,73% en la segunda, con el binomio Filmus-Tomada que sucumbió ante el ex presidente de Boca y María Eugenia Vidal.