En el marco de un mercado financiero activo, donde la lira turca se recuperó, el peso y el real fueron las únicas monedas que se depreciaron. Mientras que el real fue el que peor la pasó, con una pérdida de 1,6 %, el peso cedió 0,42%, sin que interviniera el Banco Central.
Según publicó el portal Infobae, las críticas del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, al presidente de la Reserva Federal (Banco Central de Estados Unidos) en relación a la suba de las tasas de interés produjeron un debilitamiento del dólar.
El enojo de Trump es producto de que el Banco Central Europeo mantiene sus tasas de interés sin cambios, mientras Estados Unidos las sube. Esto produjo subas en el euro y en la Libra Esterlina.
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Por otra parte, un informe del Banco Paribas de Brasil expuso la vulnerabilidad de ambos países ante la elección presidencial de octubre, donde Lula sigue siendo un candidato proscripto.