La diputada nacional Juliana Di Tullio criticó al juez Bonadío por el allanamiento a las ex oficinas de la empresa Hotesur, administradora del hotel Alto Calafate, propiedad de la presidenta Cristina Kirchner. La bonaerense calificó el accionar del magistrado como "amenaza mafiosa" y "apriete" y también señaló que la oposición "le quitó el cuerpo a la política para que hablen las corporaciones", en referencia al rechazo al tratamiento del reemplazante del juez Eugenio Zaffaroni en la Corte Suprema.
La jefa del bloque kirchnerista en la cámara de Diputados cuestionó el accionar del juez, y lo definió como "un hecho político" el allanamiento en un departamento de la calle Lavalle. Y agregó: "Lo que hizo el juez es una operación política, no me sorprende. Me parece vergonzoso, es una amenaza mafiosa. Es un cambio de domicilio de una sociedad anónima y a lo sumo (la empresa) puede tener una multa de 3 mil pesos".
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Por eso, Di Tullio consideró que hay "un intento serio de voltear a la presidenta en términos económicos y políticos" y recordó que Bonadío "fue el juez de la servilleta de Cavallo", en referencia a una conocida denuncia del ex ministro de Economía contra el gobierno de Menem.
Además, se refirió a la negativa de los senadores de la oposición a nombrar al reemplazante de Eugenio Zaffaroni a partir de 2015, lo cual lo calificó como "una barbaridad lamentable" producto de que "la oposición le ha quitado el cuerpo a la política para que hablen las corporaciones".
"Los que se llenan la boca hablando de república se juntan para decir que no van a poner el miembro que la Corte tiene que tener", concluyó.
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