Con todos los indicadores en contra, la gestión de la gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal, cerrará con un balance más que negativo, muy lejos de lo que el blindaje mediático muestra.
A pocos meses de concluir la gestión provincial, los números de Vidal son contundentes para mal. Con base en una política económica de ajuste, la gobernadora deja más pobres y desempleados además de una gran ausencia de gestión.
De acuerdo con un informe realizado por el periodista Alfredo Zaiat para Página 12, el macrismo provincial dejará un un déficit financiero de alrededor de $50.000 millones en las cuentas públicas. Para llegar a ese resultado, la gobernadora debió recortar en un 30% nominal la Obra Pública, cifras que se convertirán en algo mayor al 50% real de ajuste.
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Uno de los factores que más debilita las cuentas bonaerenses está relacionado con la caída de la recaudación fiscal. Un informe de la consultora Analogías señaló que ese concepto cayó en un 15% en términos reales. El faltante de caja pone a la provincia en una situación más que delicada hacia diciembre y la forma de llegar al fin del mandato sería con más ajuste.
En cuanto a la deuda el total de la Provincia de Buenos Aires pasó de 9360 millones de dólares en diciembre de 2015 a 11.959 millones de dólares en junio 2019, pero además se incrementó al 82,7% la participación de los compromisos en moneda extranjera. Durante el primer año de la próxima gestión se deberán pagar 2600 millones de dólares en intereses.
La Obra Pública, otro de los caballitos de batalla del blindaje mediático, tampoco es lo que dicen los medios. De acuerdo con lo expuesto por Zaiat "Con una cartera de préstamos de Organismos Multilaterales de más de 1200 millones de dólares, en su mayoría dedicados a Infraestructura, la Provincia de Buenos Aires no ha ejecutado prácticamente nada de los proyectos previstos".
Del mismo modo, tampoco avanzan los proyectos nacionales a ejecutarse en el territorio provincial, que en promedio su ejecución llega al 6%. "Según evalúan en los propios organismos internacionales, fueron la falta de capacidad y experiencia en la tarea de llevarlos a la práctica", apuntó Zaiat.
A pesar de lo que parece en propagandas y espacios televisivos utilizados para la promoción de la gestión provincial, la Obra Pública también fue una variable de ajuste durante la gestión. En 2018, el presupuesto del área cayó en términos reales un 23%, mientras que para este año se calcula una caída del 7%.
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