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Y, por supuesto, está la presión de los sindicatos. No existe una central gremial que no reclame modificaciones urgentes en el tributo. De llegar al Gobierno, Daniel Scioli, Mauricio Macri y Sergio Massa eximirían de pagar Ganancias a los salarios inferiores a los $ 26.000, según los distintos proyectos en danza.
A simple vista, cuesta creer que Ganancias sea un tema tan importante en el discurso sindical. En teoría, es un impuesto progresivo, que alcanza a los trabajadores de mayores ingresos y, a su vez, establece alícuotas diferenciales que son más altas cuanto más gana el contribuyente. Pero las modificaciones de los últimos años plagaron al impuesto de baches.
Hay dos grandes inconsistencias. Por un lado, las escalas del tributo están congeladas desde 2000 y las deducciones que puede hacer cada trabajador se actualizaron menos que la inflación. Eso hace que el trabajador que está alcanzado por la cuarta categoría de Ganancias pague cada vez más impuesto. Una paritaria puede hacer que el contribuyente cambie de escala, deba pagar más alícuota y, por lo tanto, reciba un aumento más bajo que el que marca la convención colectiva.
Por el otro, el Gobierno fijó un tope: el trabajador soltero que ganaba menos de $ 15000 brutos al mes en agosto de 2013 está exceptuado de pagar Ganancias, sin importar cuánto gana hoy. Eso achicó el universo de contribuyentes, pero de forma desprolija: hoy puede haber dos compañeros de trabajo que ganen, por ejemplo $ 20.000, y uno puede estar obligado a pagar Ganancias y el otro no, ya que se computa el sueldo percibido hace dos años.
Ante este cóctel de situaciones, los tres espacios políticos con más chances de alcanzar la presidencia en diciembre prometen efectuar cambios en Ganancias. Coinciden en que "emprolijar" el impuesto no acarreará costos fiscales significativos. En 2014, la cuarta categoría del impuesto a las Ganancias alcanzó a 1,3 millones de contribuyentes y recaudó $ 50.802 millones, algo menos del 5% de la recaudación total, según AFIP.
El más críptico es Daniel Scioli. El candidato del Frente para la Victoria no tiene un referente técnico encargado de discutir sobre Ganancias, decidido a enfocarse en la llamada "agenda del desarrollo". Pero la CGT oficialista que conduce Antonio Caló le mete presión y dejó saber que Scioli les prometió modificar el tributo por ley. Economistas del espacio del actual gobernador bonaerense ratificaron que trabajan en modificaciones al impuesto El encargado de analizar toda la estructura tributaria es uno de los hombres más cercanos al candidato: Rafael Perelmiter.
Según Gerardo Martínez, el titular de la Uocra, Scioli enviaría un proyecto de ley para elevar el mínimo no imponible de Ganancias y darle al régimen (mínimo no imponible, escalas y deducciones) una actualización automática mediante una fórmula polinómica que tenga en cuenta la suba del salario. Para el representante del gremio de la construcción, es imperioso llevar el mínimo no imponible a
$30.000.
En la CGT también circula otro borrador de proyecto de ley para modificar Ganancias que dispone eliminar la cuarta categoría, que afecta al trabajador en relación de dependencia, y sustituirla por un impuesto a los Ingresos. Estarían alcanzados por este tributo los trabajadores que ganen una x cantidad de veces el Salario Mínimo Vital y Móvil (SMVM), actualmente en $ 5588. Una de las ideas que se trabajó fue tributar a quienes ganen cinco SMVM al mes, lo que alcanzaría a los trabajadores con sueldos de $28.000 mensuales.
El PRO también trabaja con ideas similares. En campaña, Mauricio Macri prometió en la semana: "A los trabajadores les voy a devolver el impuesto a las ganancias para que sólo paguen los que más ganan". Según fuentes del espacio, la Fundación Pensar planea elevar el mínimo no imponible a una cifra que represente cuatro veces el salario promedio de la economía, hoy en $ 6500. Eso llevaría el mínimo a $ 26.000 mensuales. También prometen actualizar alícuotas, escalas y deducciones, para que Ganancias sea "un impuesto normal para los altos ingresos".
Sergio Massa es quien más enfáticamente propone eliminar la cuarta categoría del impuesto a las Ganancias. En su espacio, sin embargo, matizan esas palabras. Como el resto de los espacios, el massismo trabaja con la idea de una actualización importante en el tributo y fue uno de los primeros en apropiarse del tema de agenda. El proyecto de ley que ya presentó el Frente Renovador dispone elevar el salario a partir del cual tributar a $ 26.500 mensuales para el trabajador casado y con dos hijos y actualizar ese monto con el índice Ripte, que sigue la evolución de un grupo de paritarias.