Buscan al ginecólogo desaparecido que dejó millones de pesos, dólares, euros y oro en su auto BMW

La familia ofrece un millón de pesos de recompensa para quien aporte datos del paradero de Daniel Casermeiro, el médico desaparecido desde el último jueves.

26 de diciembre, 2019 | 18.03

Escondido en un maizal en las afueras de San Francisco estaba el BMW 200i blanco. En el baúl había diez millones de pesos, entre moneda nacional, dólares y algunos euros y unos lingotitos de oro. El pasado jueves 19 de diciembre, hace ya una semana, el dueño del auto y de la pequeña fortuna, Daniel Casermeiro (61) dejó a sus pacientes en la sala de espera del Sanatorio Argentino, les dijo que ya regresaba y desde ese día nada más se supo de él. Parece el comienzo de un thriller policial; pero la desaparición del obstetra y ginecólogo Casermeiro es la prioridad número 1 del Gobierno y de la Policía de Córdoba que lo busca por cielo y tierra, vivo o muerto. Sus dos hijos, Federico y Diego, ofrecieron una recompensa de $ 100 mil a quién aporte datos para encontrar a su padre. Y ayer, la subieron a un millón.

Ese jueves 19, cerca del mediodía pasó por dos bancos y sacó plata, pero no los 10 millones que encontraron en el baúl de su BMW blanco. “Es un médico muy reconocido, es un excelente profesional. En el baúl siempre tenía mucha plata. Ese dinero lo iba a utilizar para comprar un campo, pero no lo había retirado del banco; su segunda actividad, casi como hobby, era la compra-venta de propiedades, le gustaba esa adrenalina del negocio, de la compra, de la venta, del movimiento de grandes cifras”, confió a El Destape una fuente de la investigación.

El mismo día, cerca de las dos de la tarde se comunicó con su esposa. Y dos horas después fue su última conexión de Whatsapp. Se supo, que el sábado siguiente, el teléfono volvió a activarse. Al atardecer del jueves, al no tener novedades suyas, sus familiares realizaron la denuncia en la Policía de San Francisco. Temían que se hubiera descompensado o que lo hubieran asaltado: “El análisis que hacemos lamentablemente no es favorable. Somos una familia de médicos y cuando pasan más de 48 horas y hay una persona que puede no estar recibiendo alimentos… más allá que pueda estar golpeada tal vez, si es que no le quitaron la vida. Mientras más horas pasan más difícil es sobrevivir. No creo que lo hayan dejado con provisiones para que subsista hasta que lo encuentren”, deslizó Diego Casermeiro a los medios de San Francisco. Y agregó: “Cada hora que pasa en una persona que puede estar agonizando o se encuentra aislada se van acortando las posibilidades de encontrarlo bien”.

La búsqueda del médico Casermeiro está al mando del fiscal de Delitos Complejos de San Francisco, Bernardo Alberione; y llegó a concentrar hasta 80 hombres y mujeres en un mismo operativo en distintos puntos como San Francisco y las localidades vecinas de Freyre y Luxardo. Hoy, el operativo comenzó a las 7 y se concentró en un canal de riego paralelo a la avenida Primeros Colonizadores, frente al Jockey Club San Francisco. Participaron más de 30 efectivos del Departamento Unidades de Alto Riesgo (DUAR) y del Grupo Especial de Rescate (GER) de la Dirección Bomberos de la Policía cordobesa.

“Estamos investigando todas las posibilidades. Trabajamos en el campo desde las 7 hasta que haya luz natural; y después en nuestras oficinas buscando datos, chequeando información, cruzando novedades y pistas”, le dijo el fiscal Alberione a El Destape. Sobre la recompensa de $ 1 millón ofrecida por la familia, el fiscal fue claro: “No es un ofrecimiento que haga la Justicia ni el Estado provincial”.

La investigación se centra en conocer las actividades desconocidas del ginecólogo y obstetra Daniel Casermeiro. En la búsqueda participa un helicóptero y drones de la Policía cordobesa. Debido a los testimonios recibidos, una vivienda fue allanada y sus ocupantes fueron interrogados acerca de sus actividades. La esposa del médico Casermeiro, sus dos hijos y nueras sabían que se dedicaba a la compra-venta de propiedades, sobre todo campos. También sabían que en su automóvil andaba con fuertes sumas de dinero; lo que fue tomado por los investigadores como una pista del manejo de dinero negro o sin declarar.

La pista del dinero es la que sigue el fiscal Alberione. Sospecha que además del negocio inmobiliario, el médico sería prestamista. Y que su desaparición estaría directamente relacionada con esta actividad ilegal.

El teléfono de Casermeiro también es investigado: su agenda, sus comunicaciones y su GPS para determinar qué pasó entre su salida el jueves 19 del Sanatorio Argentino en Iturraspe al 1.300 y la llegada del BMW al campo ubicado cerca del cruce entre la Ruta Provincial 1 y la avenida De los Constituyentes. El sábado, el teléfono del médico desaparecido se volvió a activar. Y el domingo 22 a primera hora fue encontrado el vehículo de Casermeiro: estaba abierto pero las llaves no estaban. Y en el baúl estaba la pequeña fortuna.

La última pista la dio un muchacho de la vecina localidad de Luxardo, quien declaró que la tarde del jueves le vendió al médico tres envases con Gatorade. Declaró ante la Justicia que Casermeiro estaba tranquilo y distendido.

“No somos optimistas, una semana es mucho tiempo”, señaló una alta fuente del caso. Y agregó: “Estamos cerca de las Fiestas de fin de año, nadie desaparece por propia voluntad para arruinarle las Fiestas a su familia. Tres botellas de Gatorade con más de 30°C no alcanzan ni para una tarde”.