Minutos después de que la Legislatura de la provincia de Buenos Aires aprobara la ley impositiva, el gobernador Axel Kicillof destrozó a la oposición por las modificaciones realizadas sobre la normativa, entre ellas la que le ahorra $600 millones en impuestos a Clarín y cableoperadoras, y que ahora favorecerá a los sectores más acaudalados.
En sus redes sociales el flamante mandatario provincial apuntó contra los legisladores de Juntos por el Cambio que presionaron para realizar una serie de cambios que no estaban previstos en el proyecto.
"Acaba de aprobarse en la Legislatura la Ley Impositiva 2020. La Cámara de Diputados dio media sanción al proyecto del Poder Ejecutivo, que mantenía -como el original- la recaudación del año pasado en términos reales, pero agregando segmentación y progresividad”, afirmó en su cuenta oficial de Twitter. Y profundizó: "De esta manera, la Provincia recaudaría lo mismo, pero con una contribución mayor de los que más tienen. Agregamos beneficios para jubilados, clubes de barrio, bomberos voluntarios".
"En el Senado, con su mayoría, el bloque de Juntos por el Cambio introdujo varias modificaciones, con las que NO estamos de acuerdo y no acompañamos", detalló y aseguró que en el impuesto inmobiliario urbano acordaron un mayor descuento para el segmento de los más grandes propietarios y que hubo reducción en la tasa de ingresos brutos para los operadores de cable, para los importadores y exportadores.
Asimismo, crítico con las decisiones tomadas sobre varios puntos de la normativa. "No estamos de acuerdo porque todas estas medidas desfinancian a la Provincia y favorecen a sectores concentrados. Fue su decisión política: cuando son oposición representan y defienden a los mismos sectores para los que gobernaron. Nuestro gobierno tiene prioridades distintas", apuntó.
"Nos acusaron de querer hacer un 'impuestazo', nos acusaron de perjudicar a los sectores medios, nos acusaron de no buscar el consenso. Pero ahora vemos que la cuestión era otra: defender a sectores corporativos, concentrados y a las grandes fortunas", completó el gobernador.
En el mismo sentido, minutos antes la vicegobernadora, Verónica Magario, había acusado a la oposición de resentir el presupuesto para afrontar distintas problemáticas, a raíz de los cambios introducidos en la Cámara alta. "Hablamos de 10 mil millones menos de recaudación, que se va a ver en menos escuelas, hospitales y ayuda social", apuntó.
Y continuó: "Nosotros queremos aceptar la deuda que tenemos, que no la generó el actual gobernador, y tratar de ir pagándola. Pero no con el costo de la gente. El ajuste no lo vamos a hacer sobre nuestra gente. Tendremos que empezar a renegociar y ver también cómo pagamos esa deuda interna".
"Esta ley impositiva fiscal estaba destinada a empezar a solucionar temas y a empezar a trabajar rápidamente en nuestros hospitales, nuestras escuelas, etc. La provincia de Buenos Aires tiene alrededor de 40% de pobreza, que ha afectado especialmente a nuestros niños y adolescentes, porque aproximadamente el 63% esta por debajo de la línea de pobreza", finalizó en diálogo con los medios.