El Gobierno anunció esta tarde medidas para las familias más vulnerables para mitigar el impacto económico de la cuarentena por la pandemia sobre las familias más vulnerables y las empresas más perjudicadas. La globalización de este virus toma a Argentina en uno de sus peores momentos, con una recesión que se profundizará aún más ante la paralización de algunas actividades.
Luego de tres días de reuniones del gabinete económico y social, el presidente Alberto Fernández decidió incrementar de forma extraordinaria el monto de la asignación universal por hijo. La medida se amplió a los jubilados que cobran la mínima.
El objetivo consiste en fortalecer los ingresos de los hogares que no cuentan con empleo formal, por lo que no podrán trabajar en el período que dure el aislamiento voluntario, que el Ejecutivo planteó en principio para dos semanas.
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Entre la batería de políticas también está en estudio entregarles préstamos blandos desde los bancos públicos a las compañías que necesiten de liquidez para pagar los sueldos e impuestos ante el desplome de la producción y las ventas. El macrismo colocó a miles de PyMEs al borde de la quiebra con su modelo de reprimarización de la economía, por lo que su situación ya era delicada desde antes del brote del coronavirus.
Por otra parte, se esperan controles de precios más exhaustivos por parte de la Secretaría de Comercio, a cargo de Paula Español. El mandatario ya había obligado a las fabricantes de alcohol en gel a retrotraer sus precios a los del 14 de febrero, pero algunas farmacias exhiben góndolas vacías. Una situación similar se había dado con los productos de limpieza en varios supermercados en los primeros días.
Las medidas se tomaron en conjunto entre Fernández, el ministro de Economía, Martín Guzmán, el de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, el de Desarrollo Social, Daniel Arroyo, el director ejecutivo de ANSES, Alejandro Vanoli, la administradora de AFIP, Mercedes Marcó del Pont y el presidente del Banco Central, Miguel Pesce.
Esta inyección monetaria reducirá la depresión que generará obligatoriamente la pandemia en la economía argentina. En el mundo, el crecimiento global será muy inferior al proyectado previamente. De acuerdo a la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE), podría recortarse a la mitad, de modo que sea sólo del 1,5%. “Este sería un piso demasiado bajo porque eso estaría mostrando que buena parte de los países tendrían crecimiento negativo”, precisó el organismo internacional.