El jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, relató que su reemplazante a partir del 10 de diciembre, Marcos Peña, canceló una reunión prevista entre ambos y acusó al nuevo presidente, Mauricio Macri, de no tener "vocación" para de realizar una "transición" hasta asumir el cargo sino de hacer un "'showcete' televisivo".
Las declaraciones de Aníbal llegan después de que el presidente electo el pasado 22 de noviembre en el balotaje dijera que la reunión que mantuvo ayer en la Quinta de Olivos con la actual jefa de Estado "no sirvió para nada" y se quejara de que no hubieran coordinado ninguna reunión entre viejos y nuevos ministros de acá a la toma del poder.
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"No han tenido vocación de hacer una transición. Si la vocación es hacer una transición para las cámaras, porque la intención es hacer un showcete televisivo, no es nuestra vocación. Queremos aportar datos, pero sin este gesto de chiquilines", criticó el ministro coordinador, en su habitual contacto con la prensa en la Casa de Gobierno.
Allí, refirió que él mismo convocó a su sucesor en el cargo, Marcos Peña, pero que el dirigente del PRO le pidió que fuera un encuentro "público", por lo que ironizó: "No estoy citándolo en un bar en Pompeya, sino en mi despacho", para proporcionarle información relacionada con el área.
Marcos Peña, el jefe de campaña PRO y futuro jefe de gabinete, explicó por qué no aceptó la reunión: "Cristina nos dice que no va a haber una transición, una foto o un gesto de respeto al presidente electo. Después nos avisan que la reunión entre el jefe de Gabinete y su sucesor sería clandestina, medio oculta... Estamos demasiado ocupados trabajando en formar el nuevo gobierno como para hacer reuniones secretas. Sería una falta de respeto a lo que votaron los argentinos", aseguró en radio Mitre.
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