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Según pudo averiguar El Destape, uno de los cambios que se agregó fue la expresa constancia de que la ley entrará en vigencia una vez que la Cámara de Apelaciones de Nueva York levante cualquier tipo de traba sobre la Argentina, luego del último fallo en esa instancia que hizo peligrar la sanción de la ley. Mientras esto no ocurra, el dinero que se tome como deuda para pagar a los holdouts se transferirán a Nación Fideicomisos.
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Las discusiones con la oposición "moderada" no siempre llegaron a buen puerto. El artículo 4 del proyecto final establece que, si la cámara de Nueva York no levanta las cautelares que le impiden a la Argentina pagar normalmente, eso habilita al Gobierno a realizar nuevos acuerdos con los buitres, pero los mismos deben ser aprobados por el Congreso de la Nación. El Bloque Justicialista votó en contra de este artículo, considerando que es responsabilidad del Poder ejecutivo el acuerdo que alcance. Finalmente, fue aprobado en la discusión en particular.
Uno de los puntos principales fue el techo al endeudamiento. Si bien la redacción original establecía que la deuda debía servir para cubrir los nuevos pasivos que se contraían con estos arreglos, sin especificar monto, por pedido de los bloques peronistas disidentes se fijó un límite a la emisión de bonos por 12.500 millones de dólares.
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A su vez, el proyecto que se debatirá a partir de las 14 de este miércoles en el Senado obliga a los tenedores de bonos que acepten las nuevas ofertas del Tesoro a renunciar a cualquier otro litigio judicial que pretendan impulsar, cerrando así ese frente con quienes acepten lo propuesto por el Gobierno.
También se elimina el segundo párrafo del artículo 11, el cual aseguraba que los bonos que se vayan a emitir estaban exentos de pagar impuestos provinciales, algo que el peronismo rechazó por considerarlo contrario al federalismo.
Por último, y a pedido del socialismo, se crea una comisión bicameral de seguimiento y gestión de la deuda, que estará compuesto por 10 diputados y 10 senadores.