Abal Medina: "Abren el paraguas antes que llueva, porque saben que pierden"

En el cierre de una agitada semana en términos políticos, el senador del Frente Para la Victoria y ex jefe de Gabinete, accedió a una entrevista con El Destape donde entregó su visión respecto a las denuncias de fraude, las urnas quemadas y la falta de reconocimiento al resultado provisorio en Tucumán, la posterior represión y el pedido de la oposición por cambiar el sistema de votación de cara a los comicios de octubre que deja al gobierno en el centro de la escena:

-Cualquier hecho que busque violar la voluntad popular, desde quemar urnas, hasta el robo de boletas o querer cambiar un telegrama, son todos hechos completamente repudiables lo haga quien lo haga, pero también es necesario destacar que se trata de delitos que deben que ser atendidos por el código penal, y no el electoral como denuncia la oposición.

-Creo que ya hay un uso y abuso de estas denuncias para ganar electores de todo el país y crear una mirada apocalíptica de cara a las elecciones de octubre. Lo que señala Cano, suponiendo que es verdad, es sobre el escrutinio provisorio, y él sabe bien que el escrutinio definitivo es el que vale, y es ahí donde hay que ver si existieron errores en los telegramas y sancionar a quien corresponda si fue así.

- El sistema de Tucumán tiene falencias, la idea de listas enormes no es buena y genera mucha discusión al interior de los partidos, lo que generó varios de los hechos de violencia que hubo en la provincia, de todas las fuerzas, y que fueron terribles. Creo que habría que ir a un sistema similar a las Primarias, para poder filtrar esa gran cantidad de candidatos en el medio.

Esto no quiere decir que no haya que mejorar el sistema. Hoy tenemos 25 procedimientos electorales distintos: uno nacional, otro en cada provincia y la Ciudad de Buenos Aires, en donde se deberá buscar coherencia y unificar criterios.

-Es enormemente irresponsable escuchar a candidatos a presidente plantear una reforma del sistema de votación en medio de un proceso electoral: es como si en un partido de fútbol se quiera cambiar las reglas en el entretiempo para meter goles con la mano.

Sus propuestas no resisten el menor análisis: existe fallo emitido por la Cámara Electoral la semana anterior donde se señalaba que era necesario mejorar el sistema, pero que obviamente no se puede reformar con un proceso electoral abierto, porque las elecciones empiezan con las PASO. Cambiar las reglas a mitad del juego es un disparate.

Hace meses se votó en Salta con sistema de voto electrónico: el PRO perdió y denunció fraude, pocos meses después fueron los comicios en Santa Fé, y denunciaron fraude. En las PASO lo mismo, y ahora en Tucumán la misma situación. El problema no es el sistema, sino que ellos pierden. Lamentablemente para ellos, no hay un sistema que garantice que el PRO gane siempre, y eso no les gusta.

-Ninguna de las fuerzas realizó reclamo alguno respecto al procedimiento previo a las Primarias, así como tampoco posteriormente, hasta esta semana. Lo que demuestra que claramente quieren dejar pegado al gobierno y decir "ellos no quisieron cambiar el sistema de votación": están abriendo el paraguas antes que llueva, porque saben que van a perder.

Se trata de zonceras electorales: nos hacen creer que en todo el mundo se vota con boleta electrónica, porque es un sistema menos seguro que el nuestro, es más rápido y ágil, y no es así. En Brasil, Venezuela, en partes de Estados Unidos se manejan con este método y las denuncias de fraude son aún mayores porque es un sistema más vulnerable. En Holanda se definió no aplicarlo, Alemania lo prohibió. Nuestro actual sistema de conteo será antiguo, un poco vetusto, pero es más seguro y efectivo, y de eso no hay duda.

-Los hechos del lunes son totalmente repudiables y no debe existir justificativo alguno para eso. Un tema central del gobierno nacional siempre fue la no represión de todas las protestas sociales, y esta no debe ser la excepción. Por eso pedimos investigar con toda la contundencia y seriedad el tema, y sancionar severamente a los responsables del hecho.