En la previa del 18F se endurecen los cruces entre los jueces y fiscales que convocan al homenaje a Alberto Nisman y quienes se oponen a la manifestación. Según los organizadores, se espera una masiva presencia de gente en distintos puntos del país.
Por un lado, el escritor, historiador y periodista Osvaldo Bayer calificó a la marcha de "golpista". Si bien sostuvo que todas las personas "tienen la libertad de hacer la manifestación", aclaró que no participará porque "es una especie de golpismo".
En declaraciones a Radio Nacional, acusó a "las fuerzas de la derecha argentina" de ser los impulsores de la marcha. En relación a esa interpretación del golpismo, Bayer concluyó que "el pueblo tiene a su favor las elecciones y allí va a poder votar a quien quiera".
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En tanto, desde la oposición consideraron que "toda la crítica" que hizo el kirchnerismo "potenció" la movilización, y aseguran que el Gobierno tiene "la responsabilidad de asegurar la paz", y ellos "la obligación de preservarla".
Los principales precandidatos presidenciales de la oposición confirmaron su presencia; tal es el caso de Mauricio Macri (PRO), Hermes Binner (UNEN), Sergio Massa (Frente Renovador), Ernesto Sanz (UNEN), Julio Cobos (UNEN), Elisa Carrió (CC-ARI), Fernando "Pino" Solanas (UNEN), José Manuel de la Sota (Peronismo Disidente).
Por otra parte, el Espacio Carta Abierta difundió un comunicado en el que reconoce sentir "estupor frente al descaro con que sectores del Poder Judicial y el Misterio Público Fiscal operan políticamente como un partido de oposición".
En un documento titulado "¿El silencio de los Inocentes?", el colectivo kirchnerista sostuvo que "mientras Argentina espera que cumplan su deber, sectores significativos del Poder Judicial pretenden tapar sus incapacidades sobreactuando actitudes opositoras".
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La concentración saldrá el miércoles a las 18 desde la Plaza del Congreso y se dirigirá hasta la Unidad Fiscal AMIA, frente a la Plaza de Mayo. Se montará un fuerte operativo de seguridad en la traza perimetral, que estará delimitada por las calles Lavalle, desde avenida Callao hasta el bajo, y Venezuela, desde Entre Ríos y el bajo, del epicentro porteño.
La marcha fue lanzada el 6 de febrero por los fiscales Guillermo Marijuan, Ricardo Sáenz, Carlos Stornelli, y José María Campagnoli, además del titular del gremio de los judiciales, Julio Piumato. Ellos ya anunciaron que estarán en la primera fila de la manifestación.
Asimismo, confirmó su presencia y la de su familia la exesposa de Nisman, la jueza Sandra Arroyo Salgado, quien aseguró que tanto ella como sus hijas, Iara y Kala, irán para homenajear la labor del difunto fiscal y no por otros motivos políticos o sociales. "Hacemos saber que participaremos de la misma respetando el original propósito con el que fue concebida, esto es: rendir, silenciosamente, un homenaje en su memoria", indicó en un comunicado.
La presidenta Cristina Fernández, que el lunes pasado anticipó su retorno desde Santa Cruz y se trasladó a la residencia presidencial de Chapadmalal, se prevé que estará mañana en la residencia de Olivos cuando se realice la movilización.
Del operativo de seguridad participarán la Policía Metropolitana y la Federal, además de la Gendarmería y la Prefectura. Habrá medidas especiales para los familiares de Nisman.