Tras la victoria de Alberto Fernández, el mandatario de Brasil, Jair Bolsonaro, salió a repudiar la decisión democrática del pueblo argentino y a sus críticas se sumó su hijo, Eduardo, quien realizó repudiables declaraciones homofóbicas contra Estanislao Fernández. Ahora, el canciller argentino Jorge Faurie adelantó que la administración de Mauricio Macri no tiene previsto repudiar a través de un comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores la actitud del Gobierno brasilero.
"Hay que evitar magnificar este tipo de cuestiones. Mantenemos un diálogo con Brasil que es importante. Las relaciones son relevantes y hay que mantenerlas en una perspectiva de colaboración”, indicó el funcionario en diálogo con Radio La Red.
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Y excusó: “Creo que las acciones de repudio como hecho público solamente van a construir una división mayor. Hay que construir este diálogo que será imprescindible para el mantenimiento de los vínculos que tenemos”.
Además, Faurie minimizó las declaraciones de su par, el canciller de Brasil, Ernesto Araújo, quien dijo que "las fuerzas del mal" festejaron la victoria del kirchnerismo. Para el funcionario macrista, ese tipo de manifestaciones "tienen que ver con una posición crítica que han mantenido” el Gobierno de Bolsonaro sobre la vicepresidenta electa Cristina Kirchner por su cercanía al preso político y ex presidente, Lula Da Silva.
En tanto, el canciller remarcó que será importante construir "un canal de diálogo y no confrontar con Brasil” para mantener las buenas relaciones comerciales.
"Ambos países tienen que tener un diálogo de construcción y razonabilidad. No dudo que en esta etapa de transición se van a generar esos vínculos que es imprescindible para ambos países", concluyó.
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