El primer ministro británico denunció "interferencias chinas" tras detenciones por espionaje

10 de septiembre, 2023 | 13.21

El primer ministro británico, Rishi Sunak, denunció hoy ante su homólogo chino, Li Qiang, las "interferencias" de Beijing en el Parlamento del Reino Unido, tras conocerse dos detenciones por espionaje ocurridas hace seis meses.

Sunak se reunió con el primer ministro chino, Li Qiang, durante la cumbre del G20 en India que se realizó este fin de semana, y le "transmitió sus importantes preocupaciones sobre la interferencia china en la democracia parlamentaria del Reino Unido", informó la cadena de noticias británica BBC.

El asunto que se dio a conocer hoy, ronda en torno a la detención de dos hombres por parte de agentes de la policía británica el 13 de marzo.

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Los hombres -uno de 20 años y otro de 30- son sospechosos de infringir el artículo 1 de la Ley de Secretos Oficiales de 1911", informó Scotland Yard en un comunicado.

Ambos fueron arrestados en marzo en virtud y puestos en libertad bajo fianza en octubre.

Según el diario Sunday Times, uno de ellos tuvo contactos con diputados del partido conservador en el poder mientras trabajaba como asistente parlamentario.

Entre las personas con las que tuvo relación se encuentran el ministro de seguridad, Tom Tugendhat, y la presidenta del comité de asuntos exteriores, Alicia Kearns, entre otros.

Varias fuentes gubernamentales declinaron hacer comentarios sobre cuestiones de seguridad.

El hombre en cuestión no fue identificado, pero el Sunday Times dijo que había vivido en China durante un tiempo.

En tanto, el Comando Antiterrorista de la policía metropolitana, que supervisa los delitos relacionados con el espionaje, está investigando.

La revelación de este asunto se produce ahora que Londres mostró su disposición al diálogo con Beijing, tras años de difíciles relaciones, y reaviva el debate sobre la relación entre ambos países.

Ha habido una creciente preocupación por el espionaje chino y también por la interferencia en el Parlamento, con dudas sobre si se deberían haber tomado más medidas para mitigar los riesgos.

Otros países, en particular Australia y Canadá, también acusaron recientemente a China de espionaje o interferencia en la política, pero Beijing niega cualquier actividad de este tipo.

Si bien las tensiones por causas de espionaje o de amenazas más amplias a la seguridad han ido en aumento, en los últimos meses se han visto intentos tanto de Washington como de Londres de estabilizar las relaciones con China.

El ministro de Asuntos Exteriores del Reino Unido, James Cleverly, visitó Beijing hace menos de dos semanas.

Pero, tras conocerse los arrestos de marzo, el diputado conservador Iain Duncan Smith cuestionó el enfoque del Reino Unido hacia China y tuiteó: "¿Qué precio tuvo la visita de Cleverly a Beijing?".

"Es hora de que reconozcamos la amenaza cada vez más profunda que ahora representa el PCC (Partido Comunista Chino) bajo (el presidente) Xi", agregó.

"Una vez más, la seguridad del Parlamento se ha visto potencialmente comprometida, lo que refuerza que no podemos ver al PCC como otra cosa que una amenaza extranjera hostil", secundó el diputado conservador Tim Loughton.

Recién en julio de este año, en el verano boreal, el Comité de Inteligencia y Seguridad del Parlamento emitió un informe largamente esperado.

El documento advertía que el gobierno había tardado en aceptar los riesgos de seguridad de Beijing.

"Parece que China tiene un alto nivel de intención de interferir con el gobierno del Reino Unido, apuntando a funcionarios y organismos en una variedad de niveles para influir en el pensamiento político del Reino Unido y la toma de decisiones relevantes para China", dice el informe.

El texto señaló las dificultades que entrañaba el procesamiento de casos relacionados con el espionaje, dado que, en aquel momento, no era un delito ser agente de un servicio de inteligencia extranjero.

Actualmente, existe en Reino Unido una legislación de seguridad nacional que otorga nuevos poderes para investigar el espionaje y otras amenazas a la seguridad. Pero esta legislación entró en vigor recién este verano en el Reino Unido, unos cuatro meses después del arresto de los dos hombres que tuvo lugar bajo la antigua Ley de Secretos Oficiales.

Con información de Télam