Los líderes de Armenia y de Azerbaiyán aceptaron ir a Bruselas para una mediación a cargo de la Unión Europea (UE) que tendrá lugar a fines de este mes con el objetivo de reducir tensiones tras la ofensiva relámpago que provocó un desplazamiento masivo de la población armenia de Nagorno Karabaj, informó hoy el bloque en el marco de una cumbre en España donde se iba a abordar el tema y a la que no acudió el presidente azerbaiyano.
El presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, anunció que invitó a la capital belga al presidente de Azerbaiyán, Ilham Aliyev, y al primer ministro armenio, Nikol Pashinian, y que tuvo la confirmación de ambas partes respecto a su participación, consignó la agencia de noticias Europa Press.
Previamente, el gobierno azerbaiyano había mostrado su disposición a la conversación: "Estamos listos para celebrar pronto reuniones tripartitas en el formato de la UE, Azerbaiyán y Armenia", escribió Hikmet Hajiyev, asesor del mandatario Ilham Aliyev, en su cuenta de la red social X (antes Twitter).
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Sin embargo, la ausencia hoy del presidente en el encuentro de líderes europeos en la ciudad de Granada pareció indicar lo contrario.
Aliyev no acudió por las críticas hacia la "política de militarización" de Francia en la región, tras el anuncio de nuevos contratos de armamento con Armenia, que denuncia que Azerbaiyán busca una "limpieza étnica" con la población armenia en Nagorno Karabaj, lo que motivó que unas 100.000 personas huyeran del enclave tras la reciente ofensiva del ejército azerbaiyano.
La ministra de Relaciones Exteriores francesa, Catherine Colonna, estuvo esta semana en Ereván, la capital de Armenia, y dio luz verde el martes a la entrega de material militar.
Otro argumento dado por Aliyev para no concurrir a Granada es la ausencia de su homólogo turco, Recep Tayyip Erdogan, principal aliado, motivada oficialmente por temas de salud.
Pero es la segunda ausencia consecutiva de Erdogan a una cumbre de la Comunidad Política Europea, una especie de UE ampliada ideada por el presidente francés, Emmanuel Macron, tras tampoco asistir a la reunión de líderes que tuvo lugar en junio en Moldavia.
El líder de Azerbaiyán ya había avisado ayer que no participaría de la cumbre debido al "ambiente anti-azerbaiyano que se formó" y citó las "acusaciones" realizadas ayer por Michel, que hoy se reunió con Pashinian, Macron y el canciller alemán, Olaf Scholz.
El dirigente europeo había indicado en una entrevista que el bloque "está muy comprometidos con el apoyo a Armenia, que reciben a un gran número de refugiados que han abandonado la región en la que vivían".
En la misma línea, el Parlamento europeo acusó a Azerbaiyán de llevar adelante una "limpieza étnica" contra los armenios de Nagorno Karabaj, y llamó a la UE a tomar "medidas específicas contra personas en el Gobierno" azerbaiyano, según una resolución no vinculante adoptada hoy.
Los eurolegisladores consideran "que la situación actual equivale a una limpieza étnica" y por ello condenan "enérgicamente las amenazas y los actos de violencia cometidos por las tropas azerbaiyanas".
En la resolución, los parlamentarios llamaron a que los países del bloque "adopten medidas específicas contra personas en el gobierno de Azerbaiyán" por los ataques en Nagorno Karabaj, en lo que se entendió como la promoción de sanciones similares a las que se tomaron contra autoridades rusas por la guerra en Ucrania.
Por otra parte, el presidente ruso, Vladimir Putin, dijo que era "inevitable" la ofensiva relámpago de Azerbaiyán.
"Sólo era una cuestión de tiempo antes de que Azerbaiyán empezara a restablecer el orden constitucional en esta región", declaró el dirigente del país responsable del despliegue de soldados que garanticen la paz en Nagorno Karabaj.
"Era inevitable" después de que Armenia reconociera la soberanía de Bakú sobre este territorio montañoso, añadió en declaraciones citadas por la agencia de noticias AFP.
El líder del Kremlin insistió en que Armenia seguía siendo un aliado de Rusia, pese a que el Parlamento en Ereván votó esta semana a favor de que el país se sume a la Corte Penal Internacional (CPI), una decisión que resiente aún más los vínculos luego de que el tribunal emitiera una orden de arresto contra Putin por los presuntos crímenes de guerra vinculados a la deportación de niños desde Ucrania.
Las operaciones militares lanzadas por Azerbaiyán el 19 y 20 de septiembre contra armenios de la región de Nagorno Karabaj promovieron la salida de más de 100.000 refugiados hacia Armenia.
Según datos oficiales, antes de la ofensiva 120.000 armenios vivían en este territorio del Cáucaso, un enclave cuyo territorio corresponde a Azerbaiyán pero de población -hasta entonces- mayoritariamente armenia.
Es decir, que 80% de los armenios de Nagorno Karabaj abandonaron sus hogares por miedo a las represalias de las fuerzas azerbaiyanas, que en las últimas horas detuvieron al expresidente de la autoproclamada república, Arayik Haratiunian.
El ininterrumpido y caótico flujo de migrantes atizó las denuncias de Armenia de una "limpieza étnica", algo que Azerbaiyán desmiente en forma enfática, e incluso llamó a los armenios a permanecer en Nagorno Karabaj.
Nagorno Karabaj, de mayoría armenia y cristiana, se separó de Azerbaiyán, de mayoría musulmana, luego de la desintegración de la Unión Soviética, pero el territorio nunca fue reconocido por la comunidad internacional como independiente.
Desde entonces las milicias armenias de este territorio estuvieron enfrentadas al poder de Azerbaiyán y libraron dos guerras, una entre 1988 y 1994 y la última a fines de 2020.
Con información de Télam