El presidente de Francia, Emmanuel Macron, consideró hoy que el país necesita “orden y progreso”, llamó a trabajar para evitar el regreso de la derecha y hasta anunció un plan para fomentar la natalidad, en una suerte de relanzamiento de su gestión días después de designar a un nuevo primer ministro.
En una conferencia de prensa de más de dos horas, Macron valoró los conceptos de "autoridad" y "orden" para relanzar su mandato, que parece apuntar a algunos cambios con la llegada del joven Gabriel Attal a la plaza de primer ministro.
Uniformes escolares, regular el uso de dispositivos móviles por los jóvenes, operaciones de lucha contra el tráfico de drogas y medidas para fomentar la natalidad fueron algunos de los anuncios de Macron.
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"Estoy convencido de que tenemos todo lo necesario para tener éxito. No hemos terminado con nuestra historia de progreso y nuestros hijos vivirán mañana mejor que nosotros hoy", aseguró el mandatario, con mandato hasta 2027.
En la Sala de Fiestas del Palacio del Elíseo, sede de la presidencia, confirmó que hará propias algunas de las banderas de la derecha, sobre todo en materia educativa.
Prometió que un centenar de centros educativos experimentarían este año el uso del uniforme y que la medida podría generalizarse a partir de 2026, exhortó a reformar la "instrucción cívica" y volvió a apoyar a su nueva ministra de Educación, Amélie Oudéa-Castéra, quien generó quejas de profesores al criticar la escuela pública para justificar que sus hijos van a una privada.
Macron señaló además que quería regular el uso de "pantallas" (celulares, dispositivos móviles, etc.) por parte de los menores en "casa" y en la "escuela", y no descartó "prohibiciones" ni "restricciones".
Adelantó que el polémico Servicio Nacional Universal (SNU), un programa voluntario destinado a jóvenes de liceo que busca fomentar el servicio a la Nación con actividades de cohesión y de interés general, se generalizará.
"No creo que lo simbólico sea anticuado. Lo que necesita nuestro país es orden y progreso. Hay que darle puntos de referencia", expresó, según la agencia AFP.
Anunció también un nuevo permiso de paternidad y maternidad de seis meses, y un "gran plan" para luchar contra la "lacra" de la infertilidad, con el objetivo de lograr un "rearme demográfico", porque Francia “será más fuerte si aumenta su tasa de natalidad".
El concepto estuvo atado a que horas antes se había conocido el dato de que el país registró en 2023 su nivel más bajo de nacimientos desde 1946.
Macron se comprometió a luchar contra la inmigración irregular y contra el islam radical, y hasta defendió sus leyes en los temas habitualmente levantados por la extrema derecha como una manera de "evitar su regreso" en Francia y en Europa.
La Agrupación Nacional (RN) de la ultraderechista Marine Le Pen lidera las encuestas para las elecciones al Parlamento Europeo de junio, unos diez puntos por delante del oficialismo.
"El RN como todas las extremas derechas en Europa es el partido del empobrecimiento colectivo, de la mentira", de la "ira fácil", advirtió Macron, que se declaró "infeliz" por ver a esa fuerza al frente de los sondeos.
Con información de Télam
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