El proyecto de resolución del Consejo de Seguridad de la ONU propuesto por Argelia sobre un alto el fuego en Gaza, que pide específicamente el cese de la ofensiva israelí en Rafah, no es equilibrado, dijo el jueves el Departamento de Estado de Estados Unidos, afirmando que no culpa al grupo militante palestino Hamás del conflicto.
"Es desequilibrada y no tiene en cuenta un hecho simple, que es que Hamás es culpable de este conflicto", dijo un portavoz del Departamento de Estado a los periodistas en una rueda de prensa, sin especificar si Estados Unidos vetaría la resolución.
El proyecto de Argelia también pide la liberación de todos los rehenes en manos de Hamás.
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Para ser aprobada, una resolución del Consejo necesita al menos nueve votos a favor y sin el veto de ninguno de sus miembros permanentes: Estados Unidos, Reino Unido, Francia, Rusia y China. Hasta ahora, Estados Unidos ha protegido a su aliado Israel vetando tres proyectos de resolución del Consejo sobre la guerra en Gaza.
Argelia dijo que el objetivo de la medida era "detener la matanza en Rafah". Argelia es miembro del Consejo para 2024/25.
El borrador argelino "decide que Israel, la potencia ocupante, debe detener inmediatamente su ofensiva militar y cualquier otra acción en Rafah".
Cita una sentencia de la Corte Internacional de Justicia de la semana pasada que ordenó a Israel detener inmediatamente su asalto militar a Rafah, en un fallo de emergencia histórico en el caso de Sudáfrica que acusa a Israel de genocidio. Israel niega las acusaciones de genocidio.
La ofensiva israelí en Rafah, que dura ya tres semanas, ha provocado las protestas de líderes mundiales, especialmente por el ataque aéreo del domingo, en el que murieron al menos 45 personas al declararse un incendio en un campamento de tiendas de campaña en un distrito occidental.
El Ministerio de Salud palestino cifra en más de 36.000 las víctimas mortales de la guerra en Gaza. Además, el hambre es generalizada en el estrecho enclave costero y casi todos sus 2,3 millones de habitantes han sido desplazados.
Israel afirma que actúa en defensa propia después de que el grupo militante palestino Hamás atacara Israel el 7 de octubre, matando a unas 1.200 personas y secuestrando a más de 250 rehenes, según los recuentos israelíes.
(Reportaje de Daphne Psaledakis y Kanishka Singh en Washington; Editado en español por Héctor Espinoza)
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