La canciller sudafricana, Naledi Pandor, confirmó hoy en una reunión con sus pares de los BRICS la invitación cursada a los cinco jefes de Estado para asistir a la cumbre del grupo regional en agosto, incluido el presidente ruso, Vladimir Putin, sobre quien pesa una orden de arresto internacional.
La invitación a la cumbre había sido enviada antes de que la Corte Penal Internacional (CPI) dictara el 17 de marzo pasado la orden contra el mandatario ruso, por lo que esta decisión puso en una encrucijada a las autoridades sudafricanas, que barajaron medidas legales que las amparen legalmente para evitar implementar el mandato internacional de la corte.
Esta semana, la cancillería de Sudáfrica emitió una orden para garantizar la inmunidad diplomática de los asistentes de la cumbre, lo que puede abrir el camino para la asistencia de Putin.
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"Las inmunidades y privilegios que se otorgarán a los participantes de la reunión (..) de cancilleres, (ayer y hoy) y la cumbre BRICS (que se celebrará del 22 al 24 de agosto) son las previstas en la Convención de 1946 sobre Privilegios de Inmunidades de la ONU", se lee en un documento firmado por la canciller Pandor.
Durante la jornada de hoy, el país anfitrión intentó desviar la atención sobre la eventual visita al país del presidente ruso.
"Como países reunidos hoy en esta sala, todos juntos representamos una mayoría significativa del territorio, la población y la economía del mundo", se limitó a declarar Pandor, esquivando varias preguntas sobre la invitación oficial a Putin.
Hasta el momento, el mandatario ruso no ha confirmado sus planes y el Kremlin solo dijo que Rusia participaría al "nivel adecuado".
En la reunión de cancilleres hoy, el ministro de relaciones Exteriores ruso, Serguei Lavrov, destacó que los BRICS son una "organización basada en los principios de igualdad, respeto mutuo, consenso, no intervención y apego estricto a la Carta de la ONU".
La cumbre de este año, que se celebrará en Johannesburgo, está marcada por la guerra de Ucrania y sus consecuencias más inmediatas.
Desde el inicio de la invasión, Sudáfrica defendió su imparcialidad, absteniéndose en varias ocasiones de votar las resoluciones de Naciones Unidas que condenan las acciones de Rusia, una postura similar a la de Brasil.
Ambos países forman parte del grupo regional de los BRICS, en el que también están India, China y Rusia.
No es la primera vez que Sudáfrica invoca este argumento: en 2015 fuera blanco de crítica internacional al negarse a detener al entonces presidente sudanés, Omar Hasán al Bashir, a quien también reclamaba la corte por crímenes de guerra.
Los BRICS representan el 51% de la población mundial total y producen más de un tercio de la producción de cereales del planeta.
Con información de Télam