Putin y Zelenski, en visitas a sus tropas para ratificar el respaldo a la lucha

18 de abril, 2023 | 17.00

Los presidentes ruso, Vladimir Putin, y ucraniano, Volodimir Zelenski, salieron a pisar terreno bélico y a mostrarse con sus respectivas tropas, en sendas visitas que hicieron en respaldo a sus soldados, el primero en dos provincias de Ucrania ocupadas por Rusia, y el segundo en la ciudad Avdíivka, uno de los puntos más calientes del frente de guerra oriental y escenario de duros combates.

El Kremlin reveló la visita de Putin, sin precisar la fecha, para reunirse con mandos militares en la sureña provincia ucraniana de Jerson y en la oriental provincia de Lugansk.

Rusia se anexó esas y otras dos provincias ucranianas vecinas, aunque sus fuerzas no las controlan totalmente. El Ejército ruso incluso tuvo que retirarse el año pasado de Jerson capital por una contraofensiva ucraniana.

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La Presidencia ucraniana denunció esta visita y acusó al mandatario ruso de acudir a la escena de sus "crímenes".

Este viaje "es una 'gira especial' del autor de asesinatos en masa en los territorios ocupados", afirmó en Twitter Mijailo Podoliak, consejero del presidente Zelenski.

Poco después del anuncio de la visita de Putin, autoridades ucranianas informaron que un bombardeo ruso había causado seis heridos en la ciudad de Jerson.

Se trata de la segunda visita del líder ruso en un mes a la zona ucraniana ocupada por Moscú.

"El comandante supremo de las fuerzas armadas de la Federación Rusa visitó el cuartel general de la agrupación militar 'Dniéper'", en la región de Jerson, indicó el Kremlin en un comunicado.

Putin estuvo ahí con el comandante de las fuerzas aerotransportadas rusas, el general Mijail Teplinskiy, y otros altos cargos militares para hablar de la situación en las regiones de Jerson y la vecina Zaporiyia, otra de las provincias que se anexó Rusia.

Según los analistas, esta zona podría ser el escenario de una ofensiva de las fuerzas ucranianas en primavera, para intentar arrebatar a los rusos los territorios ocupados.

El lugar es especialmente estratégico, ya que los territorios conquistados por Moscú en las regiones de Zaporiyia y Jerson forman una continuidad terrestre entre Rusia y la península de Crimea, anexada por Rusia en 2014.

La ruptura de este enlace terrestre sería un importante revés para Moscú.

Según el Kremlin, Putin felicitó a los militares con motivo de la fiesta ortodoxa de la Pascua, celebrada el domingo, y les entregó "copias de íconos".

"Es importante para mí oír su opinión sobre la situación, escucharlos, intercambiar información", declaró el gobernante, según un video divulgado por el Kremlin, informó la agencia de noticias AFP.

El Ejército ruso abandonó la ciudad de Jerson en noviembre de 2022 para replegarse al otro lado del río Dniéper.

En Lugansk, Putin se reunió con miembros del Estado Mayor de la Guardia Nacional rusa desplegados allí, según el Kremlin.

En marzo, el mandatario ruso visitó por sorpresa la península de Crimea y Mariupol, una sureña ciudad portuaria sobre el mar de Azov que las fuerzas rusas conquistaron en abril de 2022 tras un largo asedio.

Mariupol se ubica en la provincia de Donetsk, que es vecina a Lugansk y que también fue anexada por Rusia.

Actualmente, los combates más feroces tienen lugar en la ciudad de Bajmut, en la provincia de Donetsk, epicentro del conflicto y la batalla más larga y sangrienta desde el inicio de la ofensiva rusa, en febrero de 2022.

Tras unos nueve meses de enfrentamientos, dos terceras partes de la ciudad están en manos rusas.

Del otro lado, Zelenski llegó hasta la ciudad de Avdíivka, uno de los puntos más calientes del frente de guerra.

“Tengo el honor de estar aquí hoy para darles las gracias por su servicio, por la defensa de nuestra tierra, Ucrania, y de nuestras familias”, dijo Zelenski a los militares en Avdíivka, provincia de Donetsk, informó la oficina presidencial ucraniana en un comunicado.

El mandatario felicitó a los soldados por la Pascua ortodoxa, que se celebró el domingo pasado, condecoró a los militares y guardó un minuto de silencio por los ucranianos caídos en la guerra, dijo la nota.

Imágenes de la visita muestran al presidente vestido de negro, sin chaleco antibalas ni casco, primero en el exterior con militares y luego en un hangar industrial donde entregó condecoraciones estatales a los soldados.

También se ven vehículos, posiblemente de la caravana presidencial, circulando por las calles entre edificios destruidos o dañados.

Durante la visita, Zelenski fue informado por el comandante del grupo táctico-operativo “Donetsk” sobre la situación en esa región, además de charlar con integrantes de las unidades ucranianas desplegadas en la zona.

"Solo les deseo la victoria, lo que deseo a todos los ucranianos", dijo Zelenski a los militares.

Kiev se hizo tiempo, también, para cuestionar al presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, y lo invitó al país para que "comprenda" la realidad de la agresión rusa, en momentos en que Brasil promueve una mediación internacional para terminar con la guerra, iniciativa rechazada por Estados Unidos.

El vocero de la Cancillería ucraniana, Oleg Nikolenko, afirmó que Ucrania es la primera interesada en poner fin a la guerra, que observa "con interés" los esfuerzos de Lula y confía en que pueda efectuar una visita que le permita un contacto directo.

Sin embargo, en tono mucho más crítico, agregó que Lula pone "a la víctima y al agresor al mismo nivel" y por atacar a los aliados de Ucrania que la ayudan a "protegerse de una agresión asesina".

La jornada dejó además una nueva advertencia del G7 sobre los "severos costos" que enfrentarán los países que ayuden a Rusia, una declaración salida de un encuentro de los ministros de Relaciones Exteriores del bloque, reunidos por dos días en Karuizawa, un pueblo japonés de montaña.

Con información de Télam