El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, tendrá una conferencia telefónica con su colega de Rusia, Vladimir Putin, luego de que la Casa Blanca advirtiera que Moscú podría invadir Ucrania "en cualquier momento", incluso "durante los Juegos Olímpicos" de invierno que se desarrollan en China.
La primera información fue difundida por un funcionario de la Casa Blanca citado por la agencia AFP y la cadena CNN. Poco después, el Kremlin confirmó que ambos mandatarios hablarán por teléfono, por iniciativa de Estados Unidos, reportó la agencia Tass.
"La parte norteamericana pidió un coloquio con el presidente Putin y los dos presidentes hablarán mañana por la noche", apuntó el vocero del Kremlin, Dimitry Peskov. Y agregó: "El pedido precedió a una carta de la parte norteamericana".
Previo a gestionar esta conversación telefónica, Estados Unidos advirtió sobre la potencial e inminente decisión rusa de invadir Ucrania y le agregó dramatismo al pedir a sus ciudadanos, junto con sus aliados occidentales, que abandonen la potencial zona de conflicto "en las próximas 24 a 48 horas".
"Seguimos viendo signos de escalada rusa, incluida la llegada de nuevas fuerzas a la frontera con Ucrania", declaró el asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan, en conferencia de prensa, y anunció el envío de 3.000 soldados más a Polonia "en los próximos días". La Casa Blanca estima que Moscú podría pasar a la acción en Ucrania "en cualquier momento", incluso antes del final de los Juegos Olímpicos de Beijing, el 20 de febrero.
Sin dar precisiones vinculadas a la inteligencia, el funcionario fue muy específico al vaticinar que la ofensiva comenzaría probablemente con "bombardeos aéreos y ataques con misiles" que "matarán a civiles sin importar su nacionalidad". Sin embargo, aclaró que con esto "no está diciendo" que el presidente ruso, Vladimir Putin haya tomado ya la decisión de invadir a su vecino, agregó.
Estados Unidos exhortó a sus ciudadanos a salir de Ucrania "en las próximas 24 a 48 horas", pedido que replicaron distintos países como el Reino Unido y Noruega, entre otros, mientras Israel decidió retirar a su personal diplomático en el país.
Las declaraciones del asesor se produjeron tras una imprevista videoconferencia que mantuvieron los presidentes estadounidense, Joe Biden; y de Francia, Emmanuel Macron; los jefes de gobierno alemán, Olaf Scholz; y británico, Boris Johnson; así como el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg; y funcionarios de la Unión Europea (UE). Los líderes de las potencias occidentales prometieron sanciones "rápidas y severas" si el Kremlin decide una invasión, aseguró el gobierno alemán tras la reunión virtual.
"Los aliados están determinados a tomar juntos sanciones rápidas y severas contra Rusia si se presentan nuevas violaciones de la integridad territorial y la soberanía de Ucrania", señaló Steffen Hebestreit, portavoz del canciller alemán. La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen. quien también participó de la videoconferencia, avaló la idea de avanzar con sanciones a los sectores financiero y energético si escala el conflicto.
"Todas las opciones están sobre la mesa y las sanciones concernirán los sectores de las finanzas y la energía, así como las exportaciones de productos de tecnología de punta", señaló en un comunicado citado por la agencia de noticias AFP. Por su parte, el premier británico, Boris Johnson, sostuvo en la videoconferencia "temer por la seguridad de Europa en las circunstancias actuales".
El Gobierno de Putin exigió garantías vinculantes de que Ucrania y otras naciones que integraban la Unión Soviética no se sumarán a la OTAN y de que la alianza militar frene el estacionamiento de armas allí y reduzca la presencia de tropas en Europa del Este. Sin embargo, Estados Unidos y la OTAN rechazaron las exigencias.
En paralelo, Moscú anunció nuevas maniobras militares en la frontera ucraniana, que se suman a las que ya está realizando desde el jueves en Bielorrusia, un país vecino de Ucrania. Además, la Marina rusa está realizando maniobras en el mar Negro.
Las negociaciones a cuatro bandas celebradas el jueves en Berlín, en las que participaron Rusia, Ucrania, Alemania y Francia, evidenciaron la brecha que separa a Moscú de los occidentales y de su aliado ucraniano.
Con información de Télam