El secretario general de la ONU, António Guterres, volvió a pedir hoy el cese de los combates en Sudán y dijo que una escalada del conflicto podría ser "devastadora para el país y la región".
En un comunicado, Guterres dijo que la "situación humanitaria era ya precaria y ahora es catastrófica" e instó al cese de las hostilidades en Sudán, donde ya murieron 97 civiles en tres días de combates entre el Ejército nacional y un poderoso grupo paramilitar.
El Consejo de Seguridad de ONU, el máximo órgano de Naciones Unidas, realizará hoy una reunión a puerta cerrada para analizar la situación en el país árabe africano.
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El conflicto en Sudán enfrenta al jefe del Ejército y líder de facto del país, el general Abdel Fatah al-Burhan, con el general rebelde Mohamed Hamdan Daglo, comandante del grupo paramilitar Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR).
Ambos encabezaron un golpe de Estado que puso fin a la transición democrática sudanesa en octubre de 2021, cuando expulsaron a los civiles que, de forma interina y con una enorme fragilidad democrática, llegaron al poder tras el derrocamiento en 2019 del dictador Omar al Bashir, que gobernó el país 30 años.
Sin embargo, las diferencias llevaron a una pugna que degeneró en una sangrienta lucha armada y demoró planes para un retorno a la democracia.
"La ONU está con el pueblo sudanés (...) con total apoyo a sus esfuerzos para restaurar la transición democrática y construir un futuro en paz y seguro", dijo Guterres en su comunicado, informó la agencia de noticias AFP.
El diplomático mantuvo el fin de semana contactos con los dos generales sudaneses enfrentados y organizaciones regionales como la Unión Africana y la Liga Árabe, así como con mandatarios de la región para evaluar cómo desescalar la violencia en Sudán.
Al menos 97 civiles han muerto y "decenas" de combatientes han fallecido por los combates en Sudán entre las fuerzas de Al-Burhan y Daglo, según el sindicato de médicos, que contabilizó 942 civiles heridos.
El Programa Mundial de Alimentos (PMA) suspendió ayer sus actividades en Sudán luego de que tres de sus empleados sudaneses murieran un día antes por los combates en la región occidental de Darfur.
Es la segunda vez que Guterres pide el fin de los combates en Sudán desde su inicio.
"Condeno fuertemente los enfrentamientos e insto a los líderes de las Fuerzas Armadas sudanesas y a las FAR al cese inmediato de las hostilidades, que se restaure la calma y el inicio de un diálogo para resolver la crisis", dijo Guterres el sábado en un tuit.
Guterres instó también a que se garantice la seguridad del personal de la ONU y de los trabajadores humanitarios en Sudán.
Con información de Télam