El canciller alemán, Olaf Scholz, anunció hoy el suministro de nuevas armas modernas a Ucrania en las próximas semanas, abogó por que su país asuma "una responsabilidad especial" en la ayuda militar que brinda a Kiev y prometió que ese apoyo se mantendrá "el tiempo que haga falta".
"En las próximas semanas y meses Ucrania recibirá de nosotros nuevas armas modernas, sistemas de defensa antiaérea, sistemas de radar, drones de inteligencia", dijo el jefe de Gobierno durante una intervención en la Universidad Carolina de Praga.
El dirigente socialdemócrata defendió que las potencias occidentales organicen su apoyo a Kiev según un plan de trabajo "fiable y a largo plazo", informó la agencia rusa de noticias Sputnik.
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Scholz insistió en que, dentro de ese marco, imagina que "Alemania asumirá una responsabilidad especial a la hora de reforzar las capacidades de la artillería y la defensa antiaérea de Ucrania".
"Nuestro objetivo es disponer de unas fuerzas armadas ucranianas modernas, capaces de defender su país de manera duradera", insistió el canciller alemán, que impulsa más "planificación y coordinación" entre los aliados.
El canciller, acusado a menudo de tibieza en su política de apoyo militar a Ucrania, anunció recientemente que su país entregaría armamento nuevo a Kiev por valor de 500 millones de euros, incluyendo sistemas de defensa antiaérea Iris-T.
El 25 de octubre está prevista en Berlín una conferencia de expertos sobre la reconstrucción de Ucrania, en la que participará entre otros la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen.
Numerosos países condenaron la invasión militar iniciada por Rusia el 24 de febrero en Ucrania.
Rusia argumenta que el Gobierno de Kiev venía cometiendo crímenes contra los habitantes de dos provincias rusoparlantes y orientales en la región del Donbass a las que, previamente, Moscú había reconocido como Estados independientes.
El reclamo del Kremlin incluye la violación por parte de Ucrania de los Acuerdos de Paz de Minsk, de 2014 y 2015, que obligaban a Kiev a darle a esas regiones -Lugansk y Donetsk, que en sendos referendos votaron por separarse de Ucrania- autonomía y posibilidades de elegir sus propias autoridades.
En abril pasado, Rusia envió notas de protesta a los países que suministran armas a Ucrania y su canciller, Serguei Lavrov, advirtió que cualquier cargamento con armas para Kiev se convertirá en un blanco legítimo para las Fuerzas Armadas rusas.
Paralelamente, el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, comentó que los intentos de saturar a Ucrania de armamento no favorecen las conversaciones ruso-ucranianas y tendrán un efecto negativo.
Con información de Télam