El Ministerio Público de Perú abrirá una investigación de oficio contra el presidente Pedro Castillo y la primera dama, Lilia Paredes, por presunto plagio su tesis de grado académico para obtener el título de magíster en la Universidad Privada César Vallejo.
"El Ministerio Público inició una investigación de oficio contra el presidente de la República, Pedro Castillo Terrones, y su esposa Lilia Paredes, por el presunto delito de Plagio Agravado, Falsedad Genérica y Cobro Indebido en agravio del Estado, Superintendencia Nacional de Educación Superior Universitaria (Sunedu) y otros", informó el Ministerio Público a través de su cuenta de Twitter.
La investigación está a cargo del fiscal provincial Juan Ramón Tantalean Olano, de la Fiscalía Provincial Mixta de Tacabamba (distrito de Tacabamba, provincia de Chota), del Distrito Fiscal de Cajamarca, completó el Ministerio
En la denuncia, realizada por el programa televisivo “Panorama”, se expuso que tras analizar el ensayo de 121 páginas titulado “La equidad de género y los aprendizajes significativos del área personal social en los estudiantes del IV ciclo de la institución educativa N° 10465 Puña - Tacabamba - Chota”, se observó que el 54% del trabajo presentaba "coincidencias" con otros autores sin mencionar a la fuente.
Tras las acusaciones, Castillo respondió calificando como "malintencionada" la información divulgada por los periodistas. En un comunicado oficial, el mandatario expresó: "Rechazo las imputaciones 'malintencionadas' que ha hecho un programa periodístico sobre la veracidad de la tesis de maestría que hice hace más de 10 años en la Universidad César Vallejo y que basándose en un software sindican que hice una 'copia'", señaló.
Castillo, que llegó al poder proveniente del sindicalismo docente y con la educación como eje de campaña, negó cualquier acto irregular y afirmó que el trabajo académico fue validado y presentado ante un jurado calificador. "El documento de tesis presentado por el programa periodístico carece de legitimidad porque no cuenta con ningún registro o sello que confirme que es oficial. Esta denuncia es de tinte 'político' y es parte de un plan desestabilizador", añadió el Primer Mandatario.
En esta línea, comentó que le preocupa que la libertad de prensa y expresión "se preste a intereses particulares y antidemocráticos construyendo narrativas periodísticas con el objetivo de generar inestabilidad política a este gobierno y por consecuencia a la gobernabilidad del país", y criticó que algunos medios de comunicación "insistan" en "manchar" su honra y "socavar la legitimidad" que le otorgó "el pueblo peruano en una elección transparente".
Para finalizar el comunicado, el mandatario escribió: "Estas prácticas periodísticas fuera de la objetividad, la verdad y la ética, solo nos hace recordar la etapa oscura del periodismo de los años 90, cuando se negociaban las líneas editoriales de los medios de comunicación, portadas periodísticas digitadas y psicosociales"; y llamó a los medios de comunicación "a realizar su trabajo basado siempre en la verdad y la ética periodística".
Los casi nueve meses de Castillo en el poder no fueron calmos. En marzo logró salvarse de un proceso de destitución, que había sido impulsado por la oposición fujimorista, a raíz de un presunto caso de corrupción en su entorno. En abril, se levantaron protestas en repudio al alza de precios de alimentos y combustibles. El Presidente impuso un toque de queda, que luego tuvo que levantar y cuya represión dejó como saldo dos muertos. Pese a esto, Castillo enfrenta un nuevo proceso de destitución.