El paro transportista y las protestas que comenzaron hace casi dos semanas por el alza de los precios de los alimentos y los combustibles no cesa en Perú, y el epicentro este miércoles se instaló en la ciudad de Ica, en el oeste del país, al sur de Lima, la capital que anoche vivió horas de extrema violencia con protestas, represión, disturbios y más de 24 de policías heridos. Según el gobierno local de Ica, una persona falleció y dos civiles heridos, mientras que la Policía Nacional informó sobre 19 oficiales heridos. En medio de un clima de incertidumbre política, el Ejecutivo nacional envió refuerzos junto con el ministro del Interior, Alfonso Chávarry.
Aunque en varias partes del país se declararon treguas temporales, los bloqueos se mantienen en otras -como Cusco, Cerro de Pasco y Huancavelica- y dos nuevos gremios se sumaron a las protestas: el Sindicato Unitario de Trabajadores en la Educación del Perú (Sutep), que había denunciado el toque de queda decretado para ayer lunes, y la Federación de Trabajadores en Construcción Civil del Perú (Ftccp).
La jornada comenzó con una Lima llena de destrozos y algunas columnas de humo que aún en el aire, pero el clima, aunque enrarecido, ya se había calmado. A los cacerolazos, consignas de los manifestantes y gritos de la policía los había reemplazado una lluvia de rumores sobre negociaciones a puertas cerradas y pedidos de renuncia contra el jefe de gabinete, Anibal Torres, y el presidente, Pedro Castillo. El paro transportista y las protestas, sin embargo, no se han detenido en el interior del país.
El epicentro se instaló en Ica, donde el gobernador regional Javier Gallegos desnudó en un comunicado el clima de violencia que se vivió en esa localidad durante la mañana. "Lamentamos informar el sensible fallecimiento de Jhony Quinto Contreras de 25 años, al parecer, producto de un proyectil de arma de fuego. Llegó al hospital sin signos vitales", sostuvo el texto, difundido por el portal de noticias Ojo Público. Además, publicó una lista con los nombres de los 12 policías y los dos civiles heridos. "Invocamos a la población a NO exponer su integridad, respetar la propiedad pública y privada, y evitar nuevos enfrentamientos".
En paralelo, el presidente del Frente de Trabajadores Agrarios de Ica (Frentagri), Julio Carbajal, denunció a esa mismo medio peruano que Contreras falleció por un disparo en la cabeza. Otro dirigente sindical local, Russell Nina Gonzáles, denunció que los heridos son al menos 36, según el diario El Comercio. La Policía Nacional, más tarde, informó que 19 de sus oficiales resultaron heridos en Ica.
Hasta ahora, el gobierno de Castillo solo había confirmado cuatro muertos desde que empezaron las protestas hace casi dos semanas. Pero ayer lunes, la prensa también publicó que una quinta persona había fallecido en una de las protestas de ese mismo día en Huánuco, en el centro-oeste del país. De confirmarse esa víctima, ya serían seis desde que comenzó esta última crisis.
Sin una resolución política en el horizonte, el gobierno de Castillo decidió enviar a su ministro del Interior y reforzar a la Policía en Ica. Poco después de tuitear varias fotos del ministro rodeado de policias en camuflaje subiéndose a un avión, la cartera decidió borrar la publicación y solo informar cuando desembarcó en la ciudad del sur de Lima.
Tras un pico de violencia, la situación se calmó en la Panamericana en Ica, al menos por unas horas. Dirigentes que encabezan el paro y el bloque en esa vía declararon una tregua hasta que llegue el ministro del Interior al lugar y dialogue con ellos. Eso sí, aclararon, la medida de fuerza continúa, según el portal de noticias RPP.
En Lima, en tanto, el transporte público se reestableció por completo y, por eso, las clases presenciales volverán en la capital mañana jueves.
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