Este miércoles y jueves tendrá lugar en Madrid una nueva Cumbre del OTAN, marcada por la guerra que se desató entre Ucrania y Rusia, y la capital española ya está presenciando intensas movilizaciones que exigen la disolución de la Alianza Atlántica y reclaman por la paz en el continente europeo. "¡No a la guerra, no a la OTAN!" o "Sus guerras no las pagamos" eran algunas de las leyendas que se repetían entre manifestantes, mientras otros sostenían carteles en los que se podían leer mensajes como "Haced la paz, no la guerra" o "Gastos militares para escuelas y hospitales".
Por el rechazo que provoca la Cumbre, Madrid estará bajo máxima seguridad y contará con el despliegue de 10 mil policías. En las movilizaciones de este domingo, en tanto, participaron -según estimaciones oficiales- dos mil personas. La de esta semana será la segundas Cumbre que se celebra en ese país y con motivo de cumplirse 40 años de la adhesión de España a la alianza.
"La Alianza Atlántica hace promoción de la guerra, del comercio de armas y la política exterior de España aumenta los gastos militares en lugar de aumentar los gastos sociales y sanitarios", evaluó para la agencia de noticias AFP, David Llorente, manifestante de 45 años. En tanto, otra de las presentes, Virginia Cádiz de 74, dijo que protestaba por segunda vez "contra la OTAN".
A la Cumbre número 32 asistirán los jefes de Estado y de Gobierno de los 30 países aliados, así como otros invitados estratégicos para la Alianza como son Australia, Nueva Zelanda, Japón y Corea del Sur. Ucrania también está formalmente invitada, aunque la asistencia de su presidente, Volodímir Zelenski, depende de la evolución del conflicto bélico que sufre el país desde el pasado mes de febrero. También estarán presentes los titulares de la OTAN, Jens Stoltenberg, de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, y del Consejo Europeo, Charles Michel. En total, se superarán los 5.000 asistentes, entre delegaciones, servicios y prensa.
Uno de los puntos salientes de la cita girará alrededor de la forma en que la alianza puede seguir apoyando militarmente a Ucrania, especialmente mediante el envío de armamento para frenar los progresos rusos en la región del Donbass, en el este ucraniano.
A mediano plazo, la cumbre servirá para establecer un nuevo "concepto estratégico", un documento central en el que la OTAN redefine sus lineamientos ante cambios de seguridad global, que será actualizado por primera vez desde 2010 ante la invasión rusa y la influencia de China, tanto en el Indo-Pacífico como a nivel global.
Por esta última razón, a la cumbre también se invitaron los líderes de Japón, Corea del Sur, Australia y Nueva Zelanda, que no pertenecen a la OTAN. Además, en la capital española se estudiarán los pedidos de Finlandia y Suecia para sumarse a la organización, una expansión que enfrenta las resistencias de Turquía.
Con información de Télam