El secretario general de la ONU, António Guterres, advirtió hoy que el mundo asiste en 2023 a "una convergencia de desafíos nunca vistos", con la invasión rusa a Ucrania encaminada hacia "una guerra más amplia", además de la crisis climática y la pobreza extrema, y llamó a hacer "reformas fundamentales" en el sistema financiero porque de lo contrario, los "más ricos" seguirán "dejando solo migajas" para los países del sur.
"Hemos iniciado 2023 con la vista puesta en una convergencia de desafíos nunca vistos en nuestras vidas", dijo ante la Asamblea General de la ONU, que guardó un minuto de silencio por las víctimas del devastador terremoto en Turquía y Siria.
Guterres recordó que según los científicos que vigilan el llamado Reloj del Apocalipsis, la humanidad nunca estuvo tan cerca de su fin, viéndolo como una señal de alarma, según la agencia de noticias AFP.
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A medida que aumentan los "riesgos de escalada" en Ucrania, el mundo se dirige "con los ojos muy abiertos" hacia "una guerra más amplia", alertó el secretario general en un discurso sombrío en el que presentó sus prioridades para 2023.
En lo más alto de esta lista ubicó la potencial escalada de la guerra en Ucrania.
"Las perspectivas de paz siguen disminuyendo, las posibilidades de una mayor escalada y derramamiento de sangre siguen creciendo", señaló.
"Me temo que el mundo no está caminando sonámbulo hacia una guerra más amplia, me temo que lo está haciendo con los ojos muy abiertos", apuntó, antes de mencionar otras amenazas a la paz, desde el conflicto israelí-palestino hasta Afganistán, Myanmar, el Sahel y Haití.
"Si todos los países cumplieran las obligaciones que emanan de la Carta (de la ONU), el derecho a la paz estaría garantizado", sostuvo.
En términos más generales, Guterres denunció la ausencia de "visión estratégica" y "el sesgo" cortoplacista de los responsables políticos y económicos.
Al subrayar la necesidad de actuar pensando en las generaciones futuras, el diplomático portugués repitió su llamado a una "transformación radical" de la arquitectura financiera mundial, a la que culpó por el aumento de la pobreza y el hambre, la creciente brecha entre ricos y pobres, y el peso de la deuda de los países en desarrollo.
"Sin reformas fundamentales, los países y los individuos más ricos seguirán acumulando riqueza, dejando solo migajas para las comunidades y los países del sur", afirmó.
Esa preocupación fue compartida por representantes de países en desarrollo.
Cuba, que preside el G77+China, que integran 134 países en desarrollo, pidió una "acción urgente y significativa" para corregir los desequilibrios "que empujan a los países en desarrollo al borde del abismo", avivados por la pandemia de Covid-19, el aumento de los precios de los alimentos y la brecha tecnológica.
En septiembre pasado, el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), estimó que el mundo había retrocedido cinco años en términos de desarrollo humano (salud, educación, nivel de vida).
"Los objetivos de desarrollo (ODS) están desapareciendo en el espejo retrovisor", lamentó Guterres, en referencia a los 17 objetivos fijados en 2015 para lograr en 2030 la erradicación de la pobreza, la seguridad alimentaria para todos y el acceso a energías limpias y asequibles.
"Tenemos oportunidades de salvarlos", alentó el secretario general, quien está organizando una cumbre en Nueva York sobre este tema en septiembre.
También reclamó al Grupo de las 20 economías avanzadas (G20) que adopte medidas de apoyo para los países en desarrollo y sus responsabilidades en materia de lucha contra el calentamiento global.
La lucha contra el cambio climático estará en el centro de otra cumbre también prevista en septiembre, a la que Guterres invitó a los líderes mundiales, "con una condición".
"Muéstrennos una acción acelerada para esta década y nuevos planes ambiciosos para la neutralidad de carbono o, por favor, no vengan", explicó.
También arremetió una vez más contra el sector de los combustibles fósiles y pidió "establecer un rumbo creíble hacia la neutralidad de carbono" y una "revolución delas energías renovables".
Asimismo, Guterres consideró que los derechos de la mujer experimentan un "retroceso intenso".
Con información de Télam