La Organización Mundial de la Salud (OMS) alertó un número creciente de emergencias sanitarias en todo el mundo, desde el COVID-19 hasta el cólera, y señaló estar "desborada" por la fuerte demanda. En marzo de este año, la organización respondía a un total de 53 emergencias de altos nivel; además de las emergencias sanitarias se destacan emergencias humanitarias como el terremoto de Turquía y Siria y las inundaciones de Pakistán.
En su intervención en la reunión anual de la agencia de las Naciones Unidas, el profesor Walid Ammar -presidente de un comité que revisa la respuesta de emergencia de la OMS- manifestó que las brechas de financiación y personal se estaban ampliando frente a las demandas cada vez mayores. "El programa está desbordado ya que la demanda no ha hecho más que crecer con la multiplicidad y complejidad de las emergencias", afirmó.
De las 53 emergencias mencionadas, se destacan enfermedades como el coronavirus, el cólera y un brote de Marburgo en Guinea Ecuatorial y Tanzania. Además de las crisis sanitarias y humanitarias, el informe señaló que el cambio climático estaba aumentando la frecuencia de fenómenos como inundaciones y ciclones, todas ellos consecuencias de las sanitarias.
Según dicho informe, el presupuesto básico del programa de emergencias para el período 2022-20023 solo está financiado en un 53%, lo que exige una financiación más estable. Mientras tanto, la OMS y los Estados miembros están intentando reformar el modo en que el organismos y los países responden ante las emergencias y además, para reforzar la financiación de la organización.
Por su parte, el pasado lunes 22 de mayo, los países miembros de la organización aprobaron un nuevo presupuesto que incluye una subida del 20% de sus cuotas obligatorias.
El COVID-19 causó la pérdida de unos 337 millones de años de vida
Los dos primeros años de la pandemia de coronavirus costaron cerca de 337 millones de años de vida, al provocar la muerte prematura de millones de personas, estimó la OMS. "Es como perder 22 años de vida por cada deceso de más", declaró a la prensa Samira Asma, jefa adjunta de la OMS de datos y análisis, citó AFP. Sólo en 2020 y 2021, el Covid-19 causó la pérdida de 336,8 millones de años de vida en todo el mundo, según la agencia de Naciones Unidas dedicada a la salud con sede en Ginebra.
El cálculo se basa en los datos disponibles en 2022. Desde entonces, el número de muertos por Covid-19 ha seguido subiendo, aunque a un ritmo más lento, lo que impulsó a la OMS a levantar recientemente su nivel máximo de alerta sanitaria, aunque advirtió que la enfermedad no ha desaparecido después de más de tres años de pandemia.
El balance oficial de fallecimientos atribuidos a la enfermedad es actualmente de 6,9 millones de personas, pero numerosos países no facilitaron datos fiables a la OMS, que estima que la pandemia causó en realidad casi el triple de víctimas en estos tres años, es decir, al menos 20 millones de muertos.