La Cámara de Diputados de México rechazó este lunes la reforma constitucional en materia energética que presentó el presidente Andrés Manuel López Obrador en búsqueda de limitar la participación privada en el sector. Es la primera gran derrota que sufre el oficialismo mexicano luego de perder la mayoría calificada en las elecciones parlamentarias del año pasado. Ante este escenario y algunas horas más tarde, la Cámara de Diputados aprobó otra iniciativa que promovió López Obrador y que consistió en hacer cambios a la Ley Minera para proteger la producción de litio y que de esta manera la exploración, explotación y el aprovechamiento del mineral estén a cargo exclusivo del Estado. Esta última iniciativa sería aprobada en el Senado apenas ingrese, según afirmó el coordinador de los senadores de Morena, Ricardo Monreal.
La reforma en materia energética que presentó el oficialismo y fue rechazada planteaba delimitar la liberalización del mercado eléctrico, para revertir la "desaparición de las empresas energéticas del Estado", algo que fue provocado por la reforma constitucional del 2013; además proponía que al menos 54% de la energía fuera gestionada por la Comisión Federal de Electricidad (CFE), contra el 38% que maneja actualmente y el 62% en manos de privados y extranjeros. El partido oficialista de MORENA perdió la votación con 275 votos a favor y 223 en contra frente a los 334 necesarios.
La oposición rechazó la reforma porque considera que llevaría a un aumento de las emisiones de gases contaminantes y a un encarecimiento de la electricidad, algo que el propio presidente de México desmintió en más de una ocasión. "Toda la campaña en contra se ha desarrollado a partir de que nosotros queremos tener plantas que producen energía sucia y que no estamos aceptando la nueva realidad (...) Todo eso es falso", respondió López Obrador.
Estados Unidos también se manifestó en contra y advirtió que la reforma desataría "litigios interminables", argumentando que vulneraría las inversiones privadas estadounidenses en México. En una línea similar también se expresó España al mostrar preocupación por "la presencia en México de Iberdrola", empresa dedicada a la producción y distribución de la energía.
Además, tal como lo había anunciado la semana pasada en caso de que la reforma fuera rechaza, López Obrador, pidió este lunes al Congreso que apruebe un proyecto de reforma que envió para nacionalizar el litio y su producción para garantizar el desarrollo nacional. Este proyecto no requiere la mayoría calificada de manera que López Obrador hizo un "llamado respetuoso a senadores, para que si es posible hoy o mañana ya se proteja el litio".