(Actualiza con comunicado del OIEA)
El Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) informó hoy que expertos de la agencia avanzaban en la inspección de varias zonas de la central nuclear ucraniana de Zaporiyia, la más grande de europa y en manos de las tropas rusas, y remarcó que, hasta el momento, no se observaban indicaciones visibles de minas o explosivos.
"Después de nuestras solicitudes, nuestros expertos han obtenido acceso adicional al sitio. Hasta el momento no han visto minas ni explosivos. Pero aún necesitan más acceso, incluso a los techos de las unidades 3 y 4 del reactor y partes de las salas de turbinas. Mantengo la esperanza de que este acceso se conceda pronto", informó el director general del OIEA, el argentino Rafael Grossi.
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"Continuaré informando sobre los avances en este sentido", agregó, en un comunicado publicado en la página web del organismo.
Los funcionarios del OIEA visitaron varios lugares, como las piscinas de refrigeración, pero aún no fueron autorizados a controlar la terraza, donde Ucrania sospecha que los ocupantes rusos colocaron artefactos explosivos, indicó el jefe del organismo de control nuclear de la ONU.
"Estoy más bien convencido de que obtendremos esta autorización", había afirmado previamente el diplomático argentino, que agregó que se trata de "una zona de guerra activa" y que "por eso a veces puede llevar un día o dos obtener las autorizaciones".
Grossi reiteró la importancia de que el equipo del OIEA pueda verificar todas las partes de la planta nuclear para monitorear el cumplimiento de los principios básicos para proteger la planta que mantiene seis reactores inactivos.
Los principios básicos que establece el organismo son que no debe haber ataques desde o contra la planta y que no debe ser utilizada como base de operaciones o almacenamiento de armas pesadas, lanzacohetes múltiples, sistemas de artillería y municiones, y tanques.
En manos del Ejército ruso desde el 4 de marzo de 2022, la central de Zaporiyia, fue blanco de disparos y de cortes de electricidad en varias ocasiones, una situación inestable que hace temer un gran accidente nuclear.
Los temores sobre la seguridad de la planta nuclear más grande de Europa, que empezaron con la ofensiva de Moscú en Ucrania en febrero del año pasado, se vieron exacerbados por la destrucción de una represa que proporcionaba el agua de refrigeración para los reactores.
Según Ucrania, Rusia colocó tropas y armas dentro del complejo.
Con información de Télam
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