El presidente de la Conferencia Episcopal Italiana, el cardenal de Bolonia Matteo Zuppi, pidió hoy que el próximo Gobierno mantenga el denominado "ingreso de ciudadanía", el nombre con el que se aplica en el país un salario básico universal de hasta 780 euros al mes a desocupados o personas en dificultades de empleo.
"El ingreso de ciudadanía fue recibido por 4,7 millones de personas. Hay ajustes que hacerle, pero se debe mantener este esfuerzo que es muy importante en momentos en los que la pobreza puede llegar a ser aún más dura", planteó hoy Zuppi en un videomensaje enviado a Cáritas de su país.
Instituido en 2018 durante el Gobierno del entonces premier Giuseppe Conte, el ingreso otorga hasta 780 euros al mes a desocupados, en medio de una escala variable según la edad y el núcleo familiar, y establece la inscripción en un registro nacional para recibir ofertas de trabajo, de las que el beneficiario solo puede rechazar una para no perder el beneficio.
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Durante la campaña electoral, las tres fuerzas de la coalición de derecha y ultraderecha que ganó las elecciones de septiembre y se encamina a formar Gobierno (Liga, Fuerza Italia y Hermanos de Italia), se habían mostrado reticentes a mantener la medida en su versión actual y plantearon modificaciones generales.
Con unos 2.6 millones de familias beneficiarias, el Ingreso ayudó el año pasado a que un millón de personas no cayeran en la pobreza, según publicó en julio el instituto oficial de estadísticas Istat.
"Quien está en condiciones de trabajar será ayudado a encontrar un empleo. El instrumento debe estar disponible solo para quien esté imposibilitado de trabajar", planteó la líder de Hermanos de Italia, de ultraderecha, Giorgia Meloni, quien se encamina a ser la próxima premier.
En cuanto a la también derechista Liga, la propuesta fue fortalecer el ingreso para las personas no aptas para el trabajo pero rediseñarlo con mayor participación de entes privados en el caso de los desocupados aptos para ser empleados. Fuerza Italia, en tanto, propuso la sustitución del ingreso por medidas más eficaces de inclusión social y políticas activas de formación e integración en el mundo del trabajo.
Con información de Télam