Rusia interrumpirá a partir de este miércoles el suministro de gas a Polonia y Bulgaria, argumentando que el país no pagó el combustible en moneda rusa. La fecha límite para que la empresa estatal polaca PGNiG pagara en rublos venció el pasado viernes, una medida que impuso Moscú el 23 de marzo a un grupo de países que considera "hostiles" como respuesta a las sanciones que le fueron impuestas por su invasión en Ucrania.
Tras conocerse la suspensión, el Gobierno polaco ratificó que estaba preparado para afrontar cualquier interrupción de suministro desde Rusia. "No habrá escasez de gas en los hogares polacos", tuiteó la ministra del clima, Anna Moskwa, quien afirmó que "desde el primer día de la guerra" el país está listo para asumir "la plena independencia de las materias primas rusas".
"Polonia tiene las reservas de gas y las fuentes de suministro necesarias para proteger nuestra seguridad. Desde hace años nos independizamos con éxito de Rusia", sentenció. Por su parte, el primer ministro polaco, Mateusz Morawiecki, dijo que las instalaciones de almacenamiento de gas estaban llenas en un 76% y que Polonia estaba preparado para "obtener gas de todas las otras partes posibles".
Polonia importa gas licuado a través de una terminal en la costa del mar Báltico y también espera recibir suministros de Noruega a través del proyecto Baltic Pipe, cuya finalización está prevista para este año. La conexión de 900 kilómetros debería cubrir el 50% del consumo polaco.
Tras la batería de sanciones impuestas por varios países occidentales a Rusia por su invasión de Ucrania, el Kremlin advirtió que les cortaría el suministro de gas a menos que paguen en rublos.
Tras firmar un decreto presidencial el pasado 23 de marzo, el presidente de Rusia, Vladimir Putin, anunció que los países considerados por Moscú como "hostiles", entre ellos los 27 miembros de la Unión Europea, deberían pagar el gas en moneda rusa a partir del 1 de abril.
De acuerdo con dicho decreto, las empresas de los países "hostiles" tienen que solicitar en el banco ruso Gazprombank -fundado por la compañía rusa Gazprom- la apertura de cuentas en rublos, donde podrán ingresar fondos para pagar por el gas en sus monedas nacionales, como lo estipulan los contratos actuales, y la entidad, a su vez, los convertirá en rublos según el cambio de la Bolsa de Moscú.
Sin embargo, el Grupo de los Siete (integrado por Estados Unidos, Japón, Alemania, el Reino Unido, Francia, Italia y Canadá) y la Comisión Europea rechazaron la iniciativa rusa, al considerarla como un intento de evadir las sanciones.
Con información de Télam