Polonia anunció que enviará 2.000 soldados adicionales para reforzar la seguridad en su frontera oriental con Bielorrusia, en medio de tensiones con ese país y con Rusia por la invasión rusa de Ucrania. Además, el Gobierno nacionalista polaco también acusa a Bielorrusia y Rusia de organizar un nuevo flujo récord de migrantes hacia la Unión Europea (UE) que "desestabilizan la región". En noviembre pasado, la tensión ya se había sentido en el contexto de la guerra cuando medios locales e internacionales denunciaron un presunto ataque con misiles rusos que después se comprobó que eran esquirlas de uno disparado por Ucrania.
Medios polacos e internacionales denunciaron un presunto ataque con misiles rusos en una localidad de Polonia, en una zona fronteriza con Ucrania, y dos ciudadanos polacos muertos. Horas después, el Gobierno polaco confirmó el ataque, las dos víctimas, pero no dio información sobre quién fue el responsable. Sin embargo, de inmediato los Gobiernos de los países miembro de la Unión Europea comenzaron a declararse en alerta. Rusia, por su parte, tildó de "provocaciones" las acusaciones en su contra y rechazó cualquier ataque en la zona fronteriza entre Ucrania y Polonia.
Para contener estos numerosos intentos de paso de migrantes, los guardias fronterizos polacos ya habían solicitado el despliegue de 1.000 soldados a principios de semana. No obstante, Polonia advirtió recientemente sobre las "provocaciones" de Bielorrusia y los riesgos para su seguridad por la presencia del grupo ruso de mercenarios Wagner en el país vecino, que es aliado de Rusia: "No se tratará de un refuerzo de 1.000 soldados, sino de 2.000", declaró hoy el viceministro del Interior, Maciej Wasik, a la agencia de noticias estatal polaca PAP.
El plan proyecta que las tropas sean desplegadas en dos semanas y que sumen a los 2.000 agentes ya apostados en la frontera con Bielorrusia, uno de los límites orientales de la UE, agregó.
Wasik añadió que todos los intentos de entrada irregular en Polonia a través de esta ruta fueron organizados por los servicios de seguridad bielorrusos: "Si tuviésemos verdaderos guardias fronterizos del otro lado, y no grupos de contrabandistas, estos ingresos no existirían", declaró Wasik. Según los agentes polacos, 19.000 migrantes intentaron entrar en Polonia desde principios de año, frente a 16.000 en todo el año 2022. El mes pasado más de 4.000 migrantes intentaron cruzar la frontera polaca.
La tensión vivida en noviembre
Un clima de máxima tensión se extendió por Europa en apenas unos minutos en noviembre pasado cuando medios locales e internacionales denunciaron un presunto ataque con misiles rusos en una localidad de Polonia, en una zona fronteriza con Ucrania, y dos ciudadanos polacos muertos. Horas después, el Gobierno polaco confirmó el ataque, las dos víctimas, pero no dio información sobre quién fue el responsable. Sin embargo, de inmediato los Gobiernos de los países miembro de la Unión Europea comenzaron a declararse en alerta. Rusia, por su parte, tildó de "provocaciones" las acusaciones en su contra y rechazó cualquier ataque en la zona fronteriza entre Ucrania y Polonia.
Al día siguiente, tanto desde la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) como el presidente de Polonia, Andrzej Duda consideraron que el misil que cayó en el pueblo polaco de Przewodow fue lanzado por Ucrania y no por Rusia. Se trata de un giro inesperado en medio de la investigación que, en un principio, tenía a Rusia como principal responsable. El hecho ocurrió mientras Rusia lanzaba cientos de misiles contra Ucrania y generó confusión en el occidente.
Con información de Télam