El regreso del diputado francés Adrien Quatennens a su grupo parlamentario cuatro meses después de ser condenado por violencia contra su esposa generó hoy malestar en el país, incluso entre los aliados de su partido, La Francia Insumisa (LFI).
"Hubo una votación. La decisión es reintegrar a Adrien Quatennens", anunció hoy la diputada Alma Dufour, una resolución considerada inaceptable por sus aliados socialistas y ecologistas en el seno de la alianza de izquierda Nupes.
"¡Qué vergüenza!", tuiteó la alcaldesa de París, Anne Hidalgo, que forma parte del sector del Partido Socialista que es crítico con la alianza Nupes.
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"Es un error político", abundó la formación socialista en un comunicado, según replicó la agencia AFP.
Su "dimisión (...) podría ser una señal positiva para todas las mujeres", dijo por su parte la ministra de Igualdad, Isabelle Lonvis-Rome, a la cadena LCI.
Un grupo de trabajo aprobó el reintegro del diputado después de que considerara que se cumplieron las condiciones para su regreso, como la realización de un curso de concientización sobre la violencia contra las mujeres.
El legislador, considerado durante mucho tiempo el delfín del líder de LFI, Jean-Luc Mélenchon, fue condenado por violencia en diciembre de 2021, así como por el "envío regular y malintencionado de mensajes" a su mujer entre agosto y septiembre de 2022.
El diputado había reconocido los hechos y había condicionado su vuelta al curso de concientización.
Este caso hizo que se descartara la posibilidad de que el diputado de 32 años liderara el partido LFI y sacudió a la formación política, que había convertido la lucha contra la violencia machista en una de sus prioridades.
Los socios políticos de LFI en la Nupes exigieron en su momento su dimisión, pero el bloque parlamentario de Quatennens anunció en un comunicado su exclusión "hasta el 13 de abril".
La abogada de Quatennens, Jade Dousselin, había estimado en diciembre que la decisión judicial era "una advertencia solemne", pero que "no le (impedía) regresar a la Asamblea y continuar con su mandato" de diputado.
Según dijo entonces la letrada, se lo condenó por una bofetada a su esposa "hace más de un año en un contexto muy tenso" y por "reiterados SMS, que el juez reconoció que no eran de acoso, malintencionados o amenazantes".
Con información de Télam
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