El presidente de Francia, Emmanuel Macron, fue abucheado hoy durante una visita a una pequeña localidad del noreste del país, donde cientos de personas se congregaron para manifestarse en contra de la reforma jubilatoria que ha desatado las mayores protestas sociales de los últimos 30 años.
"Macrón-dimisión", coreaban los manifestantes en la localidad de Sélestat. "Nunca vimos a un presidente con un Gobierno tan corrupto como el suyo (...) Usted caerá muy pronto, ya verá", le espetó uno de los presentes, según la agencia de noticias AFP.
El mandatario, inmerso en su plan de 100 días para superar la crisis, respondió que no es "sordo" a los reproches, pero que eso no le impedirá seguir desplazándose para cumplir con su objetivo de explicarle a los franceses, cara a cara, porqué la reforma jubilatoria que impulsó es necesaria.
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La nueva ley, aprobada por decreto y promulgada el sábado, retrasa la edad de jubilación de 62 a 64 años para 2030 y adelanta a 2027 la exigencia de cotizar 43 años, y no 42 como hasta ahora, para cobrar una pensión completa.
El lunes, Macron se dio "100 días de apaciguamiento, de unidad, de ambición y de acción" para relanzar su segundo mandato con nuevas medidas sobre migración, educación y sanidad.
En el marco de esa recorrida, se trasladó esta mañana a Muttersholtz, en la frontera con Alemania, donde decenas de personas lo abuchearon.
Horas antes de su llegada, la policía había reprimido a un centenar de personas que protestaron con cacerolas.
Con información de Télam