El presidente del partido de extrema derecha de Marine Le Pen, Agrupación Nacional, y principal candidato para las elecciones legislativas francesas del domingo pasado, Jordan Bardella, anunció este martes que su fuerza está cerca de llegar a un "acuerdo" con Los Republicanos, la tradicional derecha de los ex presidentes Jacques Chirac y Nicolas Sarkozy, de cara a los comicios anticipados que convocó el presidente Emmanuel Macron, luego de sufrir un duro revés en las urnas. De esta manera, rompieron el frente republicano o democrático que rigió en el país europeo desde 2002, cuando todas las fuerzas democráticas se unieron para evitar el ascenso al poder de Jean-Marie Le Pen, el padre de Marine.
"Me alegro de que Eric Ciotti (Los Republicanos) respondiera favorablemente a esta llamada y les confirmo esta tarde que, por lo tanto, habrá un acuerdo en estas elecciones legislativas entre la Agrupación Nacional que presido y Los Republicanos", manifestó Bardella durante una entrevista para France 2. El dirigente de extrema derecha que encabezó la lista para las elecciones del Parlamento Europeo explicó que sigue en contacto con Ciotti y seguirá haciéndolo "en las próximas" horas. Se mostró confiado en que "varias docenas" de diputados de Los Republicanos "serán apoyados o investidos" por Agrupación Nacional.
El anuncio significó un cimbronazo para la escena política francesa, en donde el principio de frente republicano contra la extrema derecha regía desde hace más de dos décadas. De hecho, el presidente Macron ganó en las urnas por esa unidad de las fuerzas democráticas para derrotar a Marine Le Pen en el balotaje. Sin embargo, Los Republicanos decidieron romper con esa tradición.
Los Republicanos y Agrupación Nacional difieren en algunas reforma clave, como es el caso de las pensiones. Interrogado por este asunto, Bardella rechazó manifestarse al respecto, aunque sí adelantó que su acuerdo con la formación de Ciotti se centrará en propuestas de "poder adquisitivo, seguridad e inmigración". El presidente de Los Republicanos había abierto horas antes la puerta a una posible alianza con Agrupación Nacional, liderada por Marine Le Pen, desatando así una crisis interna en el seno de la formación, que en su mayoría se opone a cualquier tipo de acuerdo con la extrema derecha.
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En paralelo, los principales partidos del espectro político de la izquierda -La Francia Insumisa, el Partido Socialista, los 'verdes' y el Partido Comunista- anunciaron ya en la víspera un principio de acuerdo para un "nuevo frente popular" centrado en parar los pies a la ultraderecha y al macronismo. "Llamamos a constituir un nuevo frente popular que reúna de forma inédita a todas las fuerzas de la izquierda: humanistas, sindicatos, asociaciones y ciudadanos. Queremos presentar un programa de avances sociales y ecológicos para construir una alternativa a Emmanuel Macron y combatir el proyecto racista de la extrema derecha", dijeron en el comunicado en el que anunciaron que la alianza estaba próxima a cerrarse, y agregarón: "En cada circunscripción, queremos apoyar a candidatos únicos desde la primera vuelta".
Con información de EuropaPress
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